Renta Básica de Emancipación
El 22 de enero de 2008 solicité la famosa RBE, la tan ansiada ayuda al alquiler para los jóvenes que tanto se había publicitado.
Tras leerme los requisitos que debía cumplir presenté la solicitud ilusionada para poder tener un colchón sin tener que contar con el respaldo familiar para independizarme. Soy una mileurista más.
El 14 de octubre de ese mismo año recibo la carta en la que se me confirma que tengo derecho a la RBE, pero hasta junio de 2009 no recibo la cantidad correspondiente. Y cual es mi sorpresa que el 25 de mayo de 2010 se me comunica que "ha superado el límite de ...
El 22 de enero de 2008 solicité la famosa RBE, la tan ansiada ayuda al alquiler para los jóvenes que tanto se había publicitado.
Tras leerme los requisitos que debía cumplir presenté la solicitud ilusionada para poder tener un colchón sin tener que contar con el respaldo familiar para independizarme. Soy una mileurista más.
El 14 de octubre de ese mismo año recibo la carta en la que se me confirma que tengo derecho a la RBE, pero hasta junio de 2009 no recibo la cantidad correspondiente. Y cual es mi sorpresa que el 25 de mayo de 2010 se me comunica que "ha superado el límite de ingresos" y se me dan 15 días hábiles para alegar y presentar los documentos y justificaciones pertinentes.
He presentado los presupuestos de haberes de 2008 y 2009 en los que se puede comprobar que no llego ni por asomo a 22.000 euros, pero claro en el Real Decreto 1472/2007 solo hace mención a "una fuente regular de ingresos" sin especificar que las retribuciones en especie y beneficios sociales se incluirán, por lo que si se me suma el Plan de Pensiones, Seguro de Vida, horas extra, cesta de Navidad y obsequio por el aniversario de mi empresa, es verdad, supero los 22.000 euros.
Además, se me va a reclamar el dinero que recibí en concepto de ayuda con un 5% de intereses.
Solo quisiera dejar constancia de mi malestar con la forma que se está procediendo, ya que mi caso no es el único. Pienso que hay un error de base a la hora de haber redactado el real decreto. Todo esto se hubiera solucionado exigiendo la presentación de la Declaración de la Renta y especificando qué es lo que el Ministerio de Vivienda entiende por fuente de ingresos regulares.