El fuego calcina en Ourense el interior de una capilla protegida del siglo XVI

Las llamas causadas por un cortocircuito destruyen un retablo neogótico del XIX

Ourense vio arder ayer uno de sus emblemas patrimoniales. El interior de la capilla de Os Remedios, del siglo XVI y anexa al Puente Romano con el que forma un Bien de Interés Cultural (BIC), se extinguió abrasado por las llamas. Un cortocircuito originado en la parte trasera de la iglesia, al lado del retablo central, neogótico del siglo XIX, provocó un incendio que se inició pasadas las seis de la mañana y que quedó extinguido a las siete y media.

Como consecuencia del fuego, el tejado se desplomó en dos puntos de la iglesia: en la entrada y encima del retablo, que quedó completamente ...

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Ourense vio arder ayer uno de sus emblemas patrimoniales. El interior de la capilla de Os Remedios, del siglo XVI y anexa al Puente Romano con el que forma un Bien de Interés Cultural (BIC), se extinguió abrasado por las llamas. Un cortocircuito originado en la parte trasera de la iglesia, al lado del retablo central, neogótico del siglo XIX, provocó un incendio que se inició pasadas las seis de la mañana y que quedó extinguido a las siete y media.

Como consecuencia del fuego, el tejado se desplomó en dos puntos de la iglesia: en la entrada y encima del retablo, que quedó completamente calcinado, como toda la construcción de madera. Bancos, ventanas interiores y las imágenes religiosas fueron pasto de las llamas.

Entre las piezas calcinadas, la Virgen de Os Remedios, cuyo manto y peluca propagaron el fuego -los Salesianos guardan una copia-. Las llamas destrozaron los retablos laterales del siglo XVII y los exvotos del coro, rodeados de velas y estampas de la Virgen que los fieles habían depositado en la última novena. Quedaron intactos los muros perimetrales, los pilares, las esculturas de piedra y el sepulcro de los Montoto, la familia del juez, regidor y procurador general de Ourense entre los siglos XV y XVI que ordenó construir la capilla.El BIC formado por la capilla, de titularidad privada -pertenece a la familia Bobillo-, y el Puente Romano tienen la máxima protección patrimonial. Fue su proximidad al puente, zona de tránsito histórica del Camino de Santiago, la que determinó la importancia religiosa de la capilla y su referencia devota secular.

Ayer, el alcalde de Ourense, Francisco Rodríguez, anunció la disposición de la institución local a "colaborar activamente" con todas las entidades y estamentos públicos y privados para recuperar el inmueble "en el menor tiempo posible". "Hay que ponerse a trabajar ya", apremió el regidor ourensano a las instituciones, a la vista del "profundísimo deterioro" del bien patrimonial. La pérdida no es sólo patrimonial. El Obispado, que calificó de "tragedia" el incendio, cataloga las piezas destruidas en poco más de 30.000 euros, estimando sólo el valor de la reconstrucción de lo quemado.

"Es recuperable", señaló el obispo de la Diócesis de Tui-Vigo y administrador de la de Ourense, monseñor Quinteiro Fiuza. "Aquí está el corazón de la ciudad y por eso estamos hoy muy tristes", añadió. Por su parte, el delegado de Patrimonio de la Diócesis, Miguel Ángel González, advirtió de que la fachada y la arquitectura de la capilla mantienen los rasgos fundamentales por lo que sólo habrá que "limpiarla y consolidarla", aunque reconoció que el valor patrimonial del retablo es considerable.

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Pero la pérdida es fundamentalmente sentimental para los ourensanos. La capilla y su entorno forman parte importante de la identidad de la ciudad y acogen cada 8 de septiembre la más importante romería urbana, precedida de la correspondiente novena religiosa. La concejala de Cultura, Isabel Pérez, destacó otro valor de la capilla. La de Os Remedios y las de San Cosme y Portovello son las únicas capillas exentas -sin culto- de la zona urbana de la ciudad. En la misma situación se encuentra la de Santa Águeda, en Seixalvo, en el perímetro rural del municipio.

Mientras el obispo anunciaba ayer que los actos de celebración de la novena se trasladarían a la parroquia de María Auxiliadora (el colegio próximo de los Salesianos), la responsable municipal de Cultura aseguraba que se mantendrá la celebración de la tradicional feria de Os Remedios de este año. Lo que no podrá celebrarse, sin embargo, es una boda que estaba comprometida para el 21 de agosto.

Interior de la capilla de Os Remedios de Ourense tras el incendio.NACHO GÓMEZ

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