Lección rusa de la Royal Philharmonic Orchestra
La británica Royal Philharmonic Orchestra y Charles Dutoit trajeron el jueves a Galicia un programa ruso destinado a un público de aluvión, presente en el concierto, de ése que goza aplaudiendo al mínimo silencio. La formación estuvo brillante en su actuación en el Palacio de la Ópera de A Coruña, y se lució desde la Polonesa de Chaicovsqui, con el pulido bronce de sus metales y la seda dúctil de sus cuerdas.
Kirill Gerstein tocó algo plano de expresión el Concierto nº 2 de Rachmáninov. Más dijo la Royal Philharmonic Orchestra en su sobriedad, con notable precisión y bello...
La británica Royal Philharmonic Orchestra y Charles Dutoit trajeron el jueves a Galicia un programa ruso destinado a un público de aluvión, presente en el concierto, de ése que goza aplaudiendo al mínimo silencio. La formación estuvo brillante en su actuación en el Palacio de la Ópera de A Coruña, y se lució desde la Polonesa de Chaicovsqui, con el pulido bronce de sus metales y la seda dúctil de sus cuerdas.
Kirill Gerstein tocó algo plano de expresión el Concierto nº 2 de Rachmáninov. Más dijo la Royal Philharmonic Orchestra en su sobriedad, con notable precisión y bellos ambientes sonoros, en el Adagio del concierto o en toda Scheherezade, donde lucieron todas las secciones y solistas. La concertino tiene un bello sonido, expresión un poco forzada y una afinación algo vacilante para una orquesta de esa categoría.