Mujer y sufridor
Funcionario, vendedor, cura, ventero, general, comisario, inquisidor, padre, tío, amigo, oficinista... Hasta mujer. De todo eso hizo José Luis López Vázquez, y al mes de su muerte, la Academia del Cine (Zurbano, 3) le dedica un ciclo con el que recupera el talento del actor que hizo de sus caracterizaciones de un tipo común y corriente un arte.
Por casualidades de la vida uno de los mejores trabajos de López Vázquez estuvo en un mediometraje, alcanza los 35 minutos, hecho para televisión por quien este año recibirá el Goya de Honor, Antonio Mercero. Su título: La cabina, que desd...
Funcionario, vendedor, cura, ventero, general, comisario, inquisidor, padre, tío, amigo, oficinista... Hasta mujer. De todo eso hizo José Luis López Vázquez, y al mes de su muerte, la Academia del Cine (Zurbano, 3) le dedica un ciclo con el que recupera el talento del actor que hizo de sus caracterizaciones de un tipo común y corriente un arte.
Por casualidades de la vida uno de los mejores trabajos de López Vázquez estuvo en un mediometraje, alcanza los 35 minutos, hecho para televisión por quien este año recibirá el Goya de Honor, Antonio Mercero. Su título: La cabina, que desde su grabación ha formado parte de la historia de la pequeña pantalla. La Academia lo proyecta en su salón de actos el miércoles 9 (a las 18.00, entrada libre) antes del último filme que quedaba inédito (sólo se pudo ver en la Seminci) de López Vázquez: Antoni Gaudí, una visión inacabada, dirigido por John Alaimo en 1974. En realidad, la película es un documental ficcionado de poco más de una hora que protagoniza un joven estudiante madrileño, interpretado por el actor José María Lana, que viaja a Barcelona para conocer a Gaudí (López Vázquez). Ambos recorren edificios tan significativos como La Pedrera o la Sagrada Familia.