Análisis:EL CÓRNER INGLÉS

El clásico y el derby

- "El fútbol es un festival

de la fertilidad. Once

espermatozoides que intentan penetrar un óvulo".

Bjork, cantante islandesa

Estamos tan admirablemente globalizados los futboleros que cuando llaman de Inglaterra para hablar del Barça-Madrid se refieren al partido, con toda naturalidad, como the clasicou. Pero existen límites al entendimiento entre las naciones.

Llamó una radio londinense el viernes para hacer unas preguntas sobre el clasicou de hoy. "Bueno", empezó el periodista, "el Real Madrid va líder en la Liga. ¡Claramente el nuevo proyect...

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- "El fútbol es un festival

de la fertilidad. Once

espermatozoides que intentan penetrar un óvulo".

Bjork, cantante islandesa

Estamos tan admirablemente globalizados los futboleros que cuando llaman de Inglaterra para hablar del Barça-Madrid se refieren al partido, con toda naturalidad, como the clasicou. Pero existen límites al entendimiento entre las naciones.

Llamó una radio londinense el viernes para hacer unas preguntas sobre el clasicou de hoy. "Bueno", empezó el periodista, "el Real Madrid va líder en la Liga. ¡Claramente el nuevo proyecto de Florentinou Pérez está funcionando!" Respuesta, tras un breve silencio: "Eeehhh..., no". "¿No?". "No". "¿Cómo que no? Le lleva un punto de ventaja al Barcelona, un equipazo... Avanza con tranquilidad en la Champions...". "Pues no. La prensa y el público madridista dicen que esto no funciona. Es más, muchos piden la cabeza del entrenador...". "Pero ¿está hablando en serio? Es como decir que el Chelsea va primero en la Premier League, pero hay que echar a Carlo Ancelotti...". "Pues sí. Mire, lo que a veces les cuesta entender a ustedes es que los aficionados españoles, y especialmente los del Madrid y el Barça, no sólo exigen resultados. Exigen arte". "Ya, ya. Vale. Algo de eso sabemos. Pero es un equipo nuevo, la temporada acaba de comenzar, con esos jugadorazos tiene que haber un enorme potencial... Dígame, por favor, que le van a dar una oportunidad a Manuel Pellegrini, ¡unos meses por lo menos!". "Pues... seguramente. Salvo, claro, que vuelvan a perder por 6-2 este fin de semana...". "Claro".

Más tarde llamó otro periodista inglés, de un importante periódico nacional. Éste tenía un conocimiento incluso más fino de la jerga hispana. Se refirió al partido de hoy como the superclasicou. Le interesaba comparar el Barça-Madrid con el gran derby londinense, Arsenal-Chelsea, que se disputa hoy también. Para él, ambos partidos se reducían a una batalla entre el bien y el mal. El Barça y el Arsenal eran el bien; el Chelsea y el Madrid, el mal. Su razonamiento era sencillo. Los unos se habían construido a base de juventud, paciencia, amor por el balón; los otros, a base del dinero.

Con una persona que tiene las ideas tan claras no tiene mucho sentido discutir. Se le podría haber respondido que lo maravilloso del fútbol es que jamás hay garantías, ni siquiera con todo el dinero del mundo; que el dinero da grandes ventajas (el Madrid tiene cierta tranquilidad de que no va a bajar a Segunda), pero los grandes trofeos hay que currarlos. Si no, ¿por qué el Manchester City ya no tiene posibilidades de ganar nada esta temporada? O ¿por qué el Chelsea no ha podido ganar la Champions en los seis años desde que el magnate ruso Roman Abramóvich se regaló el club?

Pero no entramos en este tema. La respuesta al periodista inglés fue que asociar al Chelsea con el Real Madrid era un error en el sentido de que el Chelsea es, hoy por hoy, mucho más equipo. El Chelsea es un tanque, o un batallón de tanques, que ataca y se defiende con un orden aplastante; el Madrid es un pelotón algo anárquico de francotiradores en el que todavía no se sabe muy bien quiénes son los que disparan mejor.

Quizá la cosa habría sido diferente si el Madrid hubiera logrado fichar en el verano a su entrenador preferido, curiosamente el del Arsenal, Arsène Wenger, o su segundo preferido, curiosamente Ancelotti, del Chelsea. Se tuvieron que conformar con su tercera opción, el sufrido, pero elegante, Pellegrini, que dejará de sufrir, y disfrutará de su turrón navideño como nunca, en el poco probable caso de ganarle hoy al Barça. La verdad es que el partido inglés se ve más reñido que el español. El Barça-Madrid tiene su leyenda, y habrá mucha pasión tribal en juego, pero el Arsenal-Chelsea, como espectáculo futbolístico, promete más. El Arsenal es, junto al Barça, el equipo que mejor juega al fútbol en Europa. El Chelsea es el gran obstáculo que tienen que superar no sólo el Arsenal para poder ganar la Liga inglesa esta temporada, sino también el Barça si va a convertirse en el primer equipo que gana la Liga de Campeones dos temporadas seguidas. Pep Guardiola, el entrenador del Barcelona, insiste siempre en que hay que pensar sólo en el siguiente partido, pero en algún lugar de su mente ronda siempre el fantasma del Chelsea, el monstruo que todos temen, que provoca más miedo al Barça que el Real Madrid.

PREMIER LEAGUE: Jornada 14ª: Fulham, 1; Bolton, 1. Portsmouth, 1; Manchester United, 4 (tres goles de Rooney). West Ham, 5; Burnley, 3. Wigan, 1; Sunderland, 0. Blackburn, 0; Stoke, 0. Manchester City, 1. Hull, 1. Aston Villa, 1; Tottenham Hotspurs, 1. Hoy: Wolverhampton-Birmingham (13.00), Everton-Liverpool (14.30) y Arsenal-Chelsea (17.00, Teledeporte).

Clasificación: 1. Chelsea, 33 puntos (13 partidos). 2. Manchester United, 31 (14). 3. Tottenham, 26 (14).

4. Arsenal, 25 (12). 7. Liverpool, 20 (13).

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