A 200 y cargado de hachís

Agentes del Cuerpo Nacional de Policía detuvieron ayer en la A-49 a un supuesto narcotraficante que transportaba 850 kilos de hachís en su vehículo tras una persecución en la que el sospechoso llegó a a alcanzar los 213 kilómetros por hora. La detención se llevó a cabo en la autovía, a la altura de Huelva capital y dirección Sevilla. La gran cantidad de mercancía almacenada en el coche podía verse a través de las ventanillas, lo que facilitó la labor de los agentes, que realizaban un control de vigilancia. Tras ser detectado, el conductor se vio acorralado y aceleró hasta superar los 213 kilóm...

Agentes del Cuerpo Nacional de Policía detuvieron ayer en la A-49 a un supuesto narcotraficante que transportaba 850 kilos de hachís en su vehículo tras una persecución en la que el sospechoso llegó a a alcanzar los 213 kilómetros por hora. La detención se llevó a cabo en la autovía, a la altura de Huelva capital y dirección Sevilla. La gran cantidad de mercancía almacenada en el coche podía verse a través de las ventanillas, lo que facilitó la labor de los agentes, que realizaban un control de vigilancia. Tras ser detectado, el conductor se vio acorralado y aceleró hasta superar los 213 kilómetros por hora, según marcó un control establecido en la zona. En su empeño, llegó a embestir a los vehículos policiales que intentaban impedir su huida. Tras la frenética persecución, el detenido abandonó el vehículo y cruzó a pie los cuatro carriles de la autovía para esconderse entre unos matorrales a la altura de la localidad onubense de Hinojos. Poco después fue descubierto por la policía.

El Ministerio del Interior difundió ayer un comunicado en el que se exponían pormenorizadamente los hechos. Según la nota, el dispositivo de vigilancia había detectado algo sospechoso cuando, al acercarse al vehículo, pudieron ver perfectamente los fardos de hachís. "El coche con el cargamento ilícito se dirigió hacia la autovía A-49 y, de forma repentina, comenzó a realizar cambios bruscos de velocidad y de carril sin motivo aparente, con la única intención de detectar si era seguido", reza la nota. "El conductor comenzó a circular de forma temeraria y el vehículo, con una potencia de más de 580 caballos, adelantó incluso por el arcén".