Francesc Guardans aboga por el trabajo "silencioso" del Conca
La crisis interna del Consejo de la Cultura y las Artes (CONCA) estaba durando demasiado y el presidente de la Generalitat, José Montilla, tenía ganas de zanjar ya este tema. Ayer por la tarde convocó en su despacho a Francesc Guardans y en una reunión de poco más de media hora le anunció que esta misma semana firmará el decreto por el cual será nombrado presidente del consejo.
"Ha sido una reunión muy cordial", señaló más tarde Guardans. "Ahora lo que hace falta es que se deje de hablar del consejo y se empiece a hacerlo de las cosas que hace y de los proyectos culturales", añadió. "Ha...
La crisis interna del Consejo de la Cultura y las Artes (CONCA) estaba durando demasiado y el presidente de la Generalitat, José Montilla, tenía ganas de zanjar ya este tema. Ayer por la tarde convocó en su despacho a Francesc Guardans y en una reunión de poco más de media hora le anunció que esta misma semana firmará el decreto por el cual será nombrado presidente del consejo.
"Ha sido una reunión muy cordial", señaló más tarde Guardans. "Ahora lo que hace falta es que se deje de hablar del consejo y se empiece a hacerlo de las cosas que hace y de los proyectos culturales", añadió. "Ha habido mucho ruido mediático, pero esperemos que ahora todos podamos hacer un trabajo más silencioso y las energías se focalicen en los muchos proyectos que tenemos en marcha, porque este consejo lleva ya un tiempo funcionando y los compañeros son fantásticos".
Ha sido un mes de incertidumbre en el que el nuevo organismo, que empezó a funcionar en enero, ha tenido que bajar el ritmo de trabajo para dedicarse a arreglarse a sí mismo. El excesivo personalismo del anterior presidente, Xavier Bru de Sala, provocó que los otros 10 consejeros forzaran su sustitución, que fue presentada oficialmente como una renuncia personal después de haber cumplido la tarea de poner en marcha el consejo. Queda aún la incógnita de si Bru de Sala continuará como consejero o dejará este organismo. Aunque parece que en algunas reuniones apuntó que quería dejarlo y algun consejero incluso se lo pidió, no hay constancia de que lo haya hecho. Si fuera así, tendría que ser sustuido por el Parlament.
Francesc Guardans (Barcelona, 1952) había sido la primera opción para sustuirlo, pero la decisión se atrasó ya que desde el entorno de presidencia hubo algunas dudas sobre su idoneidad y se intentó que el consejo ofreciera de manera oficial una terna de nombres entre los cuales pudiera elegir Montilla. El consejo, empeñado en que se tome en serio su independencia, insistió y el miércoles votó por mayoría la candidatura de Guardans. Es lo que presentaron a Montilla inmediatamente y lo que el presidente, ayer, decidió refrendar.