La compañía propone cuatro tipos de 'despidos voluntarios'
Ford anunció 600 despidos la víspera de las vacaciones de agosto. Y UGT puso como condición previa para sentarse a hablar del nuevo Expediente de Regulación de Empleo, en este caso no temporal (como los cuatro anteriores) sino de extinción definitiva de contratos, que los afectados lo fueran de forma voluntaria.
Lo de los despidos voluntarios podía parecer un oxímoron, pero la compañía avanzó ayer cuatro fórmulas para llevarlo a cabo: Bajas incentivadas definitivas; bajas incentivadas con derecho a reincorporación; bajas anticipadas (para personal técnico y administrativo), y com...
Ford anunció 600 despidos la víspera de las vacaciones de agosto. Y UGT puso como condición previa para sentarse a hablar del nuevo Expediente de Regulación de Empleo, en este caso no temporal (como los cuatro anteriores) sino de extinción definitiva de contratos, que los afectados lo fueran de forma voluntaria.
Lo de los despidos voluntarios podía parecer un oxímoron, pero la compañía avanzó ayer cuatro fórmulas para llevarlo a cabo: Bajas incentivadas definitivas; bajas incentivadas con derecho a reincorporación; bajas anticipadas (para personal técnico y administrativo), y complementos para convertir económicamente en incapacidad total las situaciones de incapacidad parcial que presentan algunos trabajadores.
El cambio de actitud de la dirección, que había sido implacable desde que la plantilla rechazó en referéndum la propuesta de nuevo convenio colectivo pactada con UGT, fue celebrada por el sindicato mayoritario. El líder de la sección sindical, Gonzalo Pino, la consideró "un giro"; "el principio para resolver la situación tan complicada que venimos viviendo".
Pino tenía razones para alegrarse: el comunicado oficial de Ford hacía referencia (aunque de forma acotada) al acuerdo firmado en 2007 entre la dirección europea de la multinacional y el propio Pino. Un pacto que además de garantizar inversiones y carga de trabajo para la fábrica (ya confirmada con la asignación de los nuevos modelos de C-Max) contenía el principio de que los excedentes de plantilla en situaciones de crisis como la actual serían abordados de forma no traumática. Es decir, mediante fórmulas como las que la empresa puso ayer encima de la mesa. Pino apuntó también a que la reactivación del acuerdo de 2007 facilitaría la renovación del convenio, ya que aquel pacto contemplaba aspectos como el de los aumentos salariales.
Comisiones, CGT y STM consideraron demasiado corto el paso dado por la empresa. Y podía tratarse, advirtieron, de un movimiento de distracción para que los trabajadores no salieran esta mañana a la calle.