A PIE DE PISTA

Como jugar contra Nadal

Este extraño campeonato de los nuestros nos había colocado en situación de vida o muerte un partido antes de lo esperado. Polonia, que demostró que la élite europea todavía le queda lejos, no es tan mal equipo. Sólido quinteto titular, con jugadores muy grandes en la posición de tres, de cuatro y de cinco, y un Logan anotador y creativo en el perímetro. Scariolo hablaba de final, con f minúscula, y desde luego demostró que así lo sentía: 21 puntos arriba, cuando faltaban tres minutos, triple de Logan y a 18. Tiempo muerto de Scariolo. Que nadie dude que el último en ver el partido ganado suele...

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Este extraño campeonato de los nuestros nos había colocado en situación de vida o muerte un partido antes de lo esperado. Polonia, que demostró que la élite europea todavía le queda lejos, no es tan mal equipo. Sólido quinteto titular, con jugadores muy grandes en la posición de tres, de cuatro y de cinco, y un Logan anotador y creativo en el perímetro. Scariolo hablaba de final, con f minúscula, y desde luego demostró que así lo sentía: 21 puntos arriba, cuando faltaban tres minutos, triple de Logan y a 18. Tiempo muerto de Scariolo. Que nadie dude que el último en ver el partido ganado suele ser el entrenador. Sin embargo, los jugadores eran más concretos: "Vamos a ganar, porque somos mejores, y si perdemos será un fracaso".

Hemos visto a la selección que reconocemos. Baloncesto alegre, acierto en el tiro exterior. Paciencia a la hora de buscar a nuestros interiores. La recuperación de Garbajosa nos permite jugar con mejores espacios, algo que a Ricky le ayuda en su creación de juego. Pau, Marc y Felipe se sienten más cómodos en un juego de triangulaciones que les permite jugar uno contra uno. Rudy y Navarro, con su amenaza en el tiro exterior, están más sueltos. E incluso la rotación parece tener más claras las ideas.

Nos falta mantener este estilo contra los ogros del torneo. Francia se ha mostrado muy sólida. Probablemente el equipo más atlético, me atrevería a decir del mundo, y viene de una fase previa complicada. Su preparación eran partidos a vida o muerte. No podían permitirse quedar fuera del Europeo. Esto nos plantea la duda razonable sobre nuestra preparación. Siempre complicado de planificar, la mejor España ha venido de la vuelta a los orígenes. Juego en campo abierto, movimientos sencillos en ataque buscando a nuestras estrellas, y esfuerzo defensivo general. Las zonas no han funcionado, pero el paso adelante defensivo nos ha permitido elevar el nivel de recuperaciones de balón y de rebote. Esto último ha sido básico para poder correr.

Llegamos al momento importante del campeonato. El camino no es precisamente despejado. Incluso el calendario, teniendo que jugar los cuartos con tan poco tiempo de recuperación, no nos va a ayudar. Pero a estos jugadores les va la marcha. Lo han demostrado con creces. Da gusto verles mandar mensajes de que están bien, y confiados. Su victoria sigue siendo la menos pagada en las casas de apuestas. Y, como colofón, el final del partido Grecia-Francia fue una declaración de intenciones por parte de los dos equipos: No queremos enfrentarnos a España. Tal vez la canasta en el último segundo de De Colo (jugador del Valencia) sea el tiro ganador más amargo de su carrera. Los griegos han tenido siempre más malicia y sólo les faltó ir a felicitar al francés.

Pero para eso tendremos que dar el máximo. Sinceramente, ahora reconozco a nuestro equipo. Es la misma sensación que tengo cuando veo jugar a Nadal. Si está bien, ¿cómo le ganas?

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