La pitada nacional

Se vieron muchas banderas independentistas, se confiscaron 5.000 carteles que rezaban Catalonia is not Spain, y días antes del partido ya se sabía que se repartirían silbatos. Ninguno de los clubes que jugarían la final dijo nada, y al final pasó lo que pasó, una inmensa pitada al Rey y al himno español. Pero aquí, no pasa nada. El partido debería haber sido anulado, o los clubes deberían ser sancionados. ¿En qué país del mundo se permite esto? Es increíble, pero más increíble es la reacción general de pasividad. Si esta gente es capaz de respetar el himno de Osetia del Norte pero no re...

Se vieron muchas banderas independentistas, se confiscaron 5.000 carteles que rezaban Catalonia is not Spain, y días antes del partido ya se sabía que se repartirían silbatos. Ninguno de los clubes que jugarían la final dijo nada, y al final pasó lo que pasó, una inmensa pitada al Rey y al himno español. Pero aquí, no pasa nada. El partido debería haber sido anulado, o los clubes deberían ser sancionados. ¿En qué país del mundo se permite esto? Es increíble, pero más increíble es la reacción general de pasividad. Si esta gente es capaz de respetar el himno de Osetia del Norte pero no respeta al Rey ni al himno nacional ni a España ni a los españoles, ¿por qué tienen tantas ganas de ganar la Copa del Rey (de España)?

Ante la pasividad de ambos clubes, por mí, que no jueguen en la Liga española y que se diviertan jugando contra el Terrassa y el Azpeitia; pero sobre todo, que se haga algo para que esto no se repita, que esto es único en el mundo. ¿Cómo es posible que se permita semejante ataque a los símbolos nacionales sin que pase nada?- Gonzalo de Senna. Madrid.

Quisiera expresar mi más profundo rechazo a la pitada al himno español en la final de la copa del pasado 13 de mayo.

Yo soy republicano, nacionalista e independentista vasco pero no soporto la mala educación ni la doble moral del público que faltó al respeto al Rey, a la bandera y al himno españoles, más que nada porque los que abuchean el himno español son los mismos que se indignan cuando alguien abuchea el himno vasco o desprecia la ikurriña.

Si queremos respeto para lo propio empecemos por respetar lo ajeno, que la buena educación es gratis. Por otro lado, la decisión de TVE de censurar la pitada para ocultársela a la opinión pública española me pareció una maniobra orwelliana salida de la novela 1984 y digna de una república bananera.

¿Qué democracia, tolerancia y libertad hay en España cuando hay que ocultarle la realidad al pueblo español? ¿Hasta cuándo vivirá la "Castilla ampliada" de espaldas a la pluralidad identitaria, cultural y lingüística de España.