Un políglota para cerrar filas
Mikel Arana Etxezarreta (Ordizia, Guipúzcoa, 1973) confía en haber aprendido de los "errores" del pasado para no cometerlos en el futuro. Y por eso, la fijación de este políglota que habla euskera, castellano, inglés (cursó el antiguo COU en Chicago) e italiano (estudió el tercer curso de la carrera de Derecho en Trento) es cerrar filas y preservar, por encima de todo, la unidad en el partido. Tratándose de EB son palabras mayores y hacen pensar en una tarea formidable. Arana sabe que del mantenimiento de esa unidad -concretada en el 78% de los delegados que apoyaron la reelección de su antece...
Mikel Arana Etxezarreta (Ordizia, Guipúzcoa, 1973) confía en haber aprendido de los "errores" del pasado para no cometerlos en el futuro. Y por eso, la fijación de este políglota que habla euskera, castellano, inglés (cursó el antiguo COU en Chicago) e italiano (estudió el tercer curso de la carrera de Derecho en Trento) es cerrar filas y preservar, por encima de todo, la unidad en el partido. Tratándose de EB son palabras mayores y hacen pensar en una tarea formidable. Arana sabe que del mantenimiento de esa unidad -concretada en el 78% de los delegados que apoyaron la reelección de su antecesor, Javier Madrazo, como coordinador en la última asamblea, al pactar su su sector y el EPK- depende su suerte. Y, sobre todo, de que la prometida regeneración y relanzamiento se hagan realidad.
Licenciado en Derecho por la Universidad del País Vasco en 1996 y máster en Administración y Empresas por la Universidad Carlos III de Madrid en 2008, Arana ha desarrollado prácticamente toda su carrera profesional en el partido, al que se afilió con 23 años. Dentro de EB ha sido miembro de la Presidencia desde 2001 y portavoz de este órgano a partir de 2003. Desde esa fecha también ha formado parte del Consejo Político y ha tenido tiempo, así mismo, de desempeñar algún cargo en el Gobierno vasco, como el de director de Servicios del Departamento de Vivienda y Asuntos Sociales.
Arana se ha encontrado cómodo en el Gobierno soberanista de Ibarretxe. Él participa de la idea nacionalista, pero sabe que ahora su partido tiene que poner más fuerte que nunca el acento en los temas sociales, y en ello se va a empeñar. "Vamos a trabajar desde la oposición y a controlar al futuro Gobierno en política social y en las iniciativas económicas", adelanta. Toda su carrera ha contado con la protección de Madrazo, al que le ha respondido con una lealtad inquebrantable. Ahora toca la continuidad en los nombres, pero no en la estrategia.
El batacazo electoral ha sido tan grande que se impone un cambio de discurso muy importante y Arana resalta que se esforzará en que los logros de gestión obtenidos por EB durante sus años de Gobierno se pongan en valor ante la sociedad. Y para eso, el mejor altavoz del partido será su presencia como parlamentario en Vitoria. Fue él único que obtuvo EB el 1 de marzo y fue en Guipúzcoa.