Obama y las hienas
Debe ser verdad que Obama es un poeta. Cada vez que escucho sus discursos me viene a la cabeza eso que dice Benedetti acerca del patriotismo: "Quizá mi única noción de patria / sea esta urgencia de decir Nosotros". Y el yes, we can, ¿no es lo mismo que grita Walt Whitman desde todos y cada uno de los versos de su Canto a mí mismo?, ¿no es lo mismo que Juan Gelman proclama cuando escribe "te voy a matar, derrota"?, ¿no es lo mismo que ve Pedro Salinas "allá, al socaire de la frente", donde reside "la idea pura y en la idea pura el mañana"?
Esto sí que represen...
Debe ser verdad que Obama es un poeta. Cada vez que escucho sus discursos me viene a la cabeza eso que dice Benedetti acerca del patriotismo: "Quizá mi única noción de patria / sea esta urgencia de decir Nosotros". Y el yes, we can, ¿no es lo mismo que grita Walt Whitman desde todos y cada uno de los versos de su Canto a mí mismo?, ¿no es lo mismo que Juan Gelman proclama cuando escribe "te voy a matar, derrota"?, ¿no es lo mismo que ve Pedro Salinas "allá, al socaire de la frente", donde reside "la idea pura y en la idea pura el mañana"?
Esto sí que representa una esperanza: la política de verdad, la que moviliza el voto, aún es más una cuestión de alma que de burocracia o de intereses entre esas sectas endogámicas que se ocultan bajo las siglas de los partidos políticos. Mientras haya valientes que se atrevan a usar la poesía como un arma, habrá ciudadanos. Y los mediocres, ya saben, como las hienas: a reírse, que es algo que distrae mucho y deja el campo libre para que los demás trabajen.