Columna

Renovarse o morir

El congreso regional del PP ha culminado el proceso de renovación interna de los dos grandes partidos en Andalucía tras las pasadas elecciones autonómicas. Los cambios han sido profundos en ambas formaciones políticas. Chaves fue sustituido el pasado mes de julio en Granada por un Manuel Chaves con unos años más al frente del PSOE andaluz y Arenas ha sido sustituido este fin de semana en Córdoba por un Javier Arenas más maduro en el PP andaluz. Los relevos han sido igual de importantes en el segundo escalafón. Luis Pizarro, secretario de organización del PSOE-A, fue sustituido por Luis Pizarro...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

El congreso regional del PP ha culminado el proceso de renovación interna de los dos grandes partidos en Andalucía tras las pasadas elecciones autonómicas. Los cambios han sido profundos en ambas formaciones políticas. Chaves fue sustituido el pasado mes de julio en Granada por un Manuel Chaves con unos años más al frente del PSOE andaluz y Arenas ha sido sustituido este fin de semana en Córdoba por un Javier Arenas más maduro en el PP andaluz. Los relevos han sido igual de importantes en el segundo escalafón. Luis Pizarro, secretario de organización del PSOE-A, fue sustituido por Luis Pizarro, vicesecretario general de los socialistas andaluces y Antonio Sanz, secretario general del PP andaluz, por Antonio Sanz, nuevo secretario general del PP de Andalucía. Ahora sólo queda esperar al congreso regional de Izquierda Unida, donde todo hace indicar que el nivel de renovación será igual de impactante. Diego Valderas será relevado por Diego Valderas, ahora con escaño y todo en el Parlamento.

Tanta renovación no ha estado exenta de tensión. Las transformaciones siempre llevan aparejadas crisis internas dentro de las organizaciones. En el congreso de Granada en julio, Chaves con su renovación vio reducido en dos puntos el apoyo de los delegados a su nuevo mandato, del 99,6% pasó a un preocupante 97,1% de respaldo. Esta vez 18 de los 604 compromisarios votaron en blanco, 16 casi críticos más que en el último congreso. Un dato que evidencia la fuerte contestación al relevo de Chaves por Chaves. Más significativa ha sido la respuesta entre la militancia a la profunda transformación acometida por Arenas en el PP andaluz. De los 1.083 compromisarios, hubo 27 que votaron en blanco. Seguramente disgustados por tanto cambio. Incluso tres votos fueron declarados nulos. A lo mejor, tenían intención de votar en contra pero por la falta de costumbre rellenaron mal el voto. El cambio de Arenas por Arenas apenas logró el apoyo del 97,24%, hasta un 2,76% de los compromisarios mostró su disgusto por el calado de la renovación.

Ante el terremoto político vivido por ambas organizaciones en sus estructuras internas, no es de extrañar que estos dos líderes renovados en ambos congresos de la renovación hayan salido reforzados y tengan cuerda y futuro por delante. Ya lo dijo José Blanco, nada más conocer la renovación de Chaves por Chaves, en la clausura del congreso de Granada: "Manolo nos decía ayer: Si me queréis aquí estoy. Pues te queremos Manolo, en España y en Andalucía, en 2012, 2013, 2014 y lo que venga después". Lo mismo piensa Rajoy, tras la enésima renovación de Arenas por Arenas: "Es el revulsivo que necesita Andalucía para marcar el inicio del cambio irreversible".

En cuanto se celebre el próximo congreso de la renovación en Izquierda Unida y Diego Valderas sustituya a Diego Valderas, a los liderazgos en la política en Andalucía se les habrá dado la vuelta como a un calcetín. Qué lastima que Julián Álvarez no se renovara. El que fuera secretario general del Partido Andalucista en vez de renovarse decidió en el último congreso hacerse referente histórico, y este hecho ha impedido que el proceso de transformación de la política andaluza se pudiera cerrar al completo. Qué mal pinta el futuro de Pilar González, la actual secretaria general del PA, una dirigente nueva y que todavía no se ha renovado, lidiando en Andalucía con los renovados líderes de las grandes formaciones políticas de la comunidad.

No creo que sea bueno para Andalucía tantos cambios en los liderazgos y tanta renovación. La comunidad autónoma necesita dirigentes consolidados y con experiencia política. Líderes coetáneos de la deuda. O sea, históricos. Que conozcan los ciudadanos y que nos resulten familiares. Ya está bien de tanta manía por renovarlo todo. El roce es lo que hace el cariño.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Archivado En