Bojan, de 9 o nada

A Bojan, internacional con España, se le presuponía titular en El Molinón. Algo habitual porque el Barça apenas atinaba a ponerle el punto y final a las jugadas en la Liga. Se remataba mucho (50 ocasiones) pero se fallaba más. Lo preocupante, sin embargo, era que se erraban las ocasiones francas. Anoche se tornó la historia; el equipo azulgrana se relamió y regodeó en los últimos metros, donde falló -por insistencia y por lo cerrada que estaba la zaga contraria- pero donde también definió de perlas. Sobre todo, las ocasiones exigidas.

Guardiola entiende a la delantera con dos extremos y...

A Bojan, internacional con España, se le presuponía titular en El Molinón. Algo habitual porque el Barça apenas atinaba a ponerle el punto y final a las jugadas en la Liga. Se remataba mucho (50 ocasiones) pero se fallaba más. Lo preocupante, sin embargo, era que se erraban las ocasiones francas. Anoche se tornó la historia; el equipo azulgrana se relamió y regodeó en los últimos metros, donde falló -por insistencia y por lo cerrada que estaba la zaga contraria- pero donde también definió de perlas. Sobre todo, las ocasiones exigidas.

Guardiola entiende a la delantera con dos extremos y un punta. El ariete, por definición, es Eto'o, que lo ha jugado todo. Su suplente, según el técnico, es Henry. Y los extremos los ocupan jugadores rápidos y que conduzcan la pelota pegada a los pies -Messi, Henry, Iniesta, Pedro o Hleb-. Bojan, que lo tiene todo pero que no destaca en nada más que en el olfato, está ligado a la punta de ataque. De 9 o nada. Ante el Sporting, Bojan volvió a quedarse en el banquillo de inicio.

Aunque el empuje de la segunda línea resultó sensacional -los volantes Keita y Xavi pisaron el área en repetidas ocasiones-, casi todas las jugadas las puntearon desde la delantera. Pero se repartieron las funciones. Eto'o definió -cabeceó a gol la primera que tuvo-; Iniesta repartió asistencias y dianas -dio el primer tanto a Xavi, en estado de gracia al sumar 3 goles (2 en Champions), y marcó el cuarto. Y Messi, que también regaló un gol a Iniesta, sobre todo disparó -una al portero, otra contra la defensa, tres fuera y las dos últimas a gol. Cuando se marchó Eto'o (m. 67), el relevo se lo dio Bojan. De ariete a ariete.

Entre los tres puntas materializaron 15 disparos y 4 goles. A Bojan, que no logró conectar remate alguno, participó en dos jugadas de gol. Pero todo estaba hecho. "Nos han entrado", resumió Eto'o.