MODA

La vuelta del ángel caído

Miguel Adrover presenta en una galería de arte de Nueva York su colección para la firma ecologista Hess Natur

Ni modelos anoréxicas y cotizadas, ni pasarela flanqueada por vips, ni música discotequera y cocainómana ni nada de lo que oficialmente inunda la Semana de la Moda en Nueva York. El diseñador mallorquín Miguel Adrover, alejado de los circuitos del dedal y la aguja desde hace cuatro años, ha optado por regresar a la ciudad que le vio nacer como diseñador rompiendo las convenciones y atacando la esencia misma de la industria.

El que fuera uno de los enfants terribles de la vanguardia creativa neoyorquina a principios del nuevo siglo, forzado por circunstancias económicas a a...

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Ni modelos anoréxicas y cotizadas, ni pasarela flanqueada por vips, ni música discotequera y cocainómana ni nada de lo que oficialmente inunda la Semana de la Moda en Nueva York. El diseñador mallorquín Miguel Adrover, alejado de los circuitos del dedal y la aguja desde hace cuatro años, ha optado por regresar a la ciudad que le vio nacer como diseñador rompiendo las convenciones y atacando la esencia misma de la industria.

El que fuera uno de los enfants terribles de la vanguardia creativa neoyorquina a principios del nuevo siglo, forzado por circunstancias económicas a abandonar su trono de rey de los diseñadores emergentes -consiguió el Perry Award en esta categoría en el año 2000- ha escogido para su regreso una galería de arte. Y en ella, como si se tratara de árboles vestidos que nacen de la tierra, presentó el pasado domingo nueve modelos sobre nueve maniquíes de madera, mucho más cercanos a una escultura new age que a una percha humana y que han servido de inspiración para la colección que ha concebido para la firma alemana y ecológica Hess Natur.

Luces bajas, la calma de la naturaleza y sus sonidos proyectada sobre el fondo de la galería Matthew Marks, en el corazón del barrio de Chelsea, y nueve figuras que salen de unos gigantes maceteros cuadrados donde el agua, la tierra seca, las piedras o el musgo contribuyen a transmitir ese mensaje ecológico que la ropa de Hess Natur aspira a propagar.

Los modelos, concebidos con materiales orgánicos y con nombres como Lágrima, Higuera, Pájaro o Philoinsectus, son un abierto homenaje a la naturaleza, reinterpretada por Miguel Adrover. El propio diseñador, que siempre ha considerado la moda como un medio para transmitir un mensaje social, optó en su nueva presentación ante la sociedad neoyorquina por rematar su declaración de principios paseándose por la galería bajo una hoja de cala gigante.

Y bajo su manto verde, lágrimas de felicidad entre abrazos, que el diseñador repartió entre sus amigos neoyorquinos de otras épocas, como Suzy Menkes, la responsable de moda del International Herald Tribune que contribuyó a ponerlo de moda a finales de los noventa y que ha vuelto a celebrar su regreso en las páginas de ese diario. No es casualidad: la cultura estadounidense tiene especial debilidad por los ángeles caídos que resucitan de sus cenizas y Miguel Adrover encarna a la perfección ese modelo.

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