Intento de expropiación
Ante la aprobación hace unas semanas de uno de los trámites para la expropiación de parte de mi propiedad en un pleno del Ayuntamiento de Soria, denuncio la arbitrariedad de esa decisión por no estar fundada en razones válidas.
Ningún político ha podido justificar la necesidad de dotar de más suelo industrial a Soria, ya que en este momento hay 300 hectáreas de suelo industrial disponible en el polígono de Valcorba, para una provincia que consume un máximo de tres hectáreas al año.
El Ayuntamiento socialista se convirtió en cómplice de unas actuaciones irregulares y oscuras promo...
Ante la aprobación hace unas semanas de uno de los trámites para la expropiación de parte de mi propiedad en un pleno del Ayuntamiento de Soria, denuncio la arbitrariedad de esa decisión por no estar fundada en razones válidas.
Ningún político ha podido justificar la necesidad de dotar de más suelo industrial a Soria, ya que en este momento hay 300 hectáreas de suelo industrial disponible en el polígono de Valcorba, para una provincia que consume un máximo de tres hectáreas al año.
El Ayuntamiento socialista se convirtió en cómplice de unas actuaciones irregulares y oscuras promovidas desde la antigua corporación municipal del PP y la Junta de Castilla y León, que estoy denunciando desde hace meses y que he puesto en conocimiento de la Administración de Justicia.
Resultan además patéticos en un Estado de derecho los desafortunados comentarios de la actual portavoz popular (que presidió estérilmente el Ayuntamiento soriano durante años) cuando dijo que "la familia Marichalar no tiene ningún privilegio sobre el resto de los mortales".
Sería curioso saber qué prejuicios o complejos se esconden detrás de esos peregrinos y demagógicos comentarios de la edil.
Estoy determinado a seguir defendiendo mi legítimo interés que coincide con el auténtico interés general: cuidar para las futuras generaciones de españoles, el paisaje de Soria y el de Numancia.
Para ello, mi objetivo es retrotraer a suelo rústico lo que hoy está calificado como suelo industrial (¡caso único en Europa!) para blindar el entorno que tengo la responsabilidad de preservar.