Reportaje:

'Chispi' celebra su cumpleaños con tarta y calor

El Bioparc y otros parques protegen a los animales de las altas temperaturas

El calor apenas cedió ayer para la celebración del cumpleaños de Chispi, una de los cinco chimpancés del Bioparc de Valencia. Una tarta de frutas y zumo helado, habitual en su dieta diaria, y bizcocho y nata, extraordinarios para la celebración, compusieron el menú para su 21º aniversario. Sin embargo, también en el caso de los chimpancés, más sabe el viejo por viejo que por mono, y fue la madre de Chispi, Mirinda, la que se apropió del bizcocho en cuanto comenzó el festín. La homenajeada pudo probar algo de la tarta gelatinosa que, en cualquier caso, acabó llevándose, a la sombr...

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El calor apenas cedió ayer para la celebración del cumpleaños de Chispi, una de los cinco chimpancés del Bioparc de Valencia. Una tarta de frutas y zumo helado, habitual en su dieta diaria, y bizcocho y nata, extraordinarios para la celebración, compusieron el menú para su 21º aniversario. Sin embargo, también en el caso de los chimpancés, más sabe el viejo por viejo que por mono, y fue la madre de Chispi, Mirinda, la que se apropió del bizcocho en cuanto comenzó el festín. La homenajeada pudo probar algo de la tarta gelatinosa que, en cualquier caso, acabó llevándose, a la sombra, el macho del grupo, Napoleón, el único de los cinco chimpancés que no procede del zoo de Valencia y que hace apenas un año llegó desde el zoo de Fuengirola.

En cualquier caso, Chispi, que fue la primera que entró en contacto con el macho y que sirvió de puente entre éste y el resto de las chimpancés, celebró su cumpleaños con decenas de niños que le cantaron y que también compartieron una tarta, en este caso, de chocolate. Y todo ello bajo un calor sofocante, incluso para los animales del Bioparc.

Algunos animales se buscan la vida, como los elefantes del Bioparc, que ayer pasaron horas bajo la cascada que tienen en su recinto. A otros hay que buscarles maneras para que no sufran. En Benimantell, el responsable del centro de recuperación de animales Arca de Noé, Serafín Doménech, explicó cómo los cuatro osos siberiano-canadienses soportan las elevadas temperaturas con placas de hielo llenas de fruta. "Se abrazan a ellas, intentando comer las frutas que hemos introducido en el interior y así están fresquitos".

En el Río Safari de Elche, los yaks del Tíbet sobrellevan el calor con la ayuda de unos ponches de frutas preparados por sus cuidadores, que consisten en barreños con agua helada llenos de sandía.

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