Charlas telefónicas "esclarecedoras"

Las conversaciones telefónicas de Juan Antonio Roca y su amigo Arnaud Fabrice Albouhair resultaron "esclarecedoras" para el fiscal. El 15 de marzo de 2006, Albouhair le contó a Roca que se había montado una conferencia de prensa sobre la retirada del programa de televisión que repasaba su enorme patrimonio y actividades supuestamente ilícitas. "Todo está bajo control", garantizó Albouhair a Roca. Dos horas después, el amigo de Urquía informó a Roca de los defectos de forma que tenía la denuncia que sus abogados habían interpuesto. "Hay que poner una querella, una papeleta de conciliación, lo a...

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Las conversaciones telefónicas de Juan Antonio Roca y su amigo Arnaud Fabrice Albouhair resultaron "esclarecedoras" para el fiscal. El 15 de marzo de 2006, Albouhair le contó a Roca que se había montado una conferencia de prensa sobre la retirada del programa de televisión que repasaba su enorme patrimonio y actividades supuestamente ilícitas. "Todo está bajo control", garantizó Albouhair a Roca. Dos horas después, el amigo de Urquía informó a Roca de los defectos de forma que tenía la denuncia que sus abogados habían interpuesto. "Hay que poner una querella, una papeleta de conciliación, lo antes posible, si no, no se puede admitir", repetía Albouhair a Roca después de escuchar a una tercera persona que los investigadores y la acusación consideran que es Urquía.

Unos días después, Roca negoció telefónicamente las condiciones de compra de la casa de Urquía. En esas conversaciones pidió a los vendedores que no se preocupasen por el dinero a entregar en la firma del contrato. "Eso ya lo ponemos aquí".

El 17 de marzo, cuando ya se había firmado la venta, Roca y Albouhair vuelven a hablar. "¿Todo bajo control? ¿Qué tal tu amigo?", pregunta Roca. "Está muy contento, fenomenal", le responde.

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