Lavacolla, Peinador y Alvedro sufren una brusca caída del número de viajeros

El incremento en el número de pasajeros de los tres aeropuertos gallegos, constante desde hace varios años, se ha frenado de forma súbita en los dos últimos meses. Abril y mayo certifican, según datos del ente gestor de aeropuertos, AENA, un cambio de rumbo frente a un crecimiento que, si bien menor que otros ejercicios, se había mantenido en valores positivos en los primeros meses de 2008.

Así, frente a un sensible incremento del 2% en el número de viajeros de toda España, en mayo las tres terminales perdieron viajeros con respecto al mismo mes de 2007, sumando dos meses consecutivos (...

El incremento en el número de pasajeros de los tres aeropuertos gallegos, constante desde hace varios años, se ha frenado de forma súbita en los dos últimos meses. Abril y mayo certifican, según datos del ente gestor de aeropuertos, AENA, un cambio de rumbo frente a un crecimiento que, si bien menor que otros ejercicios, se había mantenido en valores positivos en los primeros meses de 2008.

Así, frente a un sensible incremento del 2% en el número de viajeros de toda España, en mayo las tres terminales perdieron viajeros con respecto al mismo mes de 2007, sumando dos meses consecutivos (la excepción fue Alvedro, en abril), con menos tránsito.

Baleares, Valencia, Cataluña y Madrid ya han creado entidades gestoras

Las caídas más acusadas se registraron, según la misma fuente, en Lavacolla (en abril cayó un 8,2%, hasta los 154.532 pasajeros) y Peinador, que retrocedió en mayo un 5,7% con respecto al mismo período de 2007, al situarse en 119.447 personas. A Coruña también registró un descenso superior al 5% en mayo. Por primera vez en lo que va de año, Alvedro logró sumar en abril 826 pasajeros más que Peinador, en un mes especialmente atípico para el sector, en el que la caída del tráfico aéreo en España llegó al 2,5%. La deriva del presente año contrasta con el fuerte incremento en el número de pasajeros transportado desde las terminales gallegas el ejercicio pasado, cuando Peinador había doblado el crecimiento de la media española y Alvedro lo había multiplicado por tres, con alzas en ambos casos por encima de los dos dígitos.

Sobre este escenario el Gobierno dibuja, todavía con trazo grueso, lo que será la futura descentralización del sistema aeroportuario, con su privatización parcial y el traspaso a las comunidades autónomas de la gestión del ente encargado del control del sistema, que este año entrará por primera vez en beneficios operativos. La Xunta, a través de la Consellería de Política Territorial, futura encargada de la competencia, e Innovación e Industria, en lo que concierne al turismo, se muestra optimista ante la apertura del proceso, aunque todavía no maneja datos para poder establecer una hoja de ruta de la transferencia.

La incertidumbre económica y la cancelación de rutas por parte de aerolíneas (caso de Easyjet, que abandonó Alvedro, o Vueling, que eliminó su conexión con Madrid desde Lavacolla) se encuentran entre los motivos aparentes de este retroceso en cuanto a la actividad de los aeropuertos gallegos. El transporte de carga, un indicador empleado para medir la salud de las ventas empresariales, también ha sufrido en los primeros meses del año, con descensos constantes desde enero, como es el caso de Santiago, frente a la aparente estabilidad de Peinador. La terminal viguesa había cerrado el 2007 con un alza de casi el 60% en cuanto a volumen transportado, al rozar las 2.000 toneladas. El contrapunto, en este caso, lo puso Alvedro, con un fuerte retroceso de más del 47% con respecto al cierre de 2006.

La transferencia de los aeropuertos, y sobre todo, su rentabilidad, son motivo recurrente de polémica entre algunas comunidades y el Gobierno central. Los datos de beneficios de cada terminal, celosamente guardados por AENA, sólo trascendieron a preguntas parlamentarias de CiU en 2005, cuando hizo públicos los resultados del ejercicio anterior. En ese año sólo Peinador había registrado superávit, superando en cerca de un 45% el margen de Lavacolla. De la red de 48 aeropuertos, según coinciden en señalar los propios directivos de AENA, los de gran afluencia turística son los más rentables. Entre ellos, destacan los aeródromos de Madrid, Barcelona, Palma de Mallorca, Alicante y Málaga. Las pérdidas de unos se compensan con las ganancias de otros, algo similar a lo que sucede con el sistema portuario dependiente del Estado.

El anuncio realizado por Rodríguez Zapatero para la descentralización del sistema no ha cogido desprevenidas a algunas comunidades. Es el caso de Baleares, Valencia, Cataluña y Madrid, que ya han creado entidades con personalidad jurídica propia cuyo objetivo consiste en asumir la gestión, administración y explotación de las infraestructuras aeroportuarias que en el futuro sean de titularidad autonómica. Como piezas clave de estos organismos paralelos, las cuatro comunidades han constituido lo que denominan comisiones de enlaces aéreos, para atraer nuevas compañías. Los gobiernos autonómicos de Madrid y Cataluña han dado un paso más allá con la creación de las empresas Aeropuertos de Madrid y Aeropuertos de Cataluña.