La Junta abre dos investigaciones tras la dimisión de su delegada

La Junta de Andalucía ha emprendido dos procesos de "información reservada" tras la renuncia de María José Mata como delegada en Málaga de la Consejería de Vivienda y Ordenación del Territorio. Mata dimitió el pasado jueves, dos días después de ser nombrada por el Consejo de Gobierno, tras hacerse público que creó una empresa privada de ámbito inmobiliario junto con un abogado investigado en el caso Malaya.

La Junta de Andalucía ha emprendido dos procesos de "información reservada" tras la renuncia de María José Mata como delegada en Málaga de la Consejería de Vivienda y Ordenaci...

La Junta de Andalucía ha emprendido dos procesos de "información reservada" tras la renuncia de María José Mata como delegada en Málaga de la Consejería de Vivienda y Ordenación del Territorio. Mata dimitió el pasado jueves, dos días después de ser nombrada por el Consejo de Gobierno, tras hacerse público que creó una empresa privada de ámbito inmobiliario junto con un abogado investigado en el caso Malaya.

La Junta de Andalucía ha emprendido dos procesos de "información reservada" tras la renuncia de María José Mata como delegada en Málaga de la Consejería de Vivienda y Ordenación del Territorio. Mata dimitió el pasado jueves, dos días después de ser nombrada por el Consejo de Gobierno, tras hacerse público que creó una empresa privada de ámbito inmobiliario junto con un abogado investigado en el caso Malaya mientras ejercía de inspectora provincial de Urbanismo de la Junta de Andalucía en Málaga.

La primera investigación interna tiene que ver con la propia Mata, y se centrará en saber si existió incompatibilidad legal entre la actividad privada y el cargo de funcionaria. Esta fiscalización la realizará la Dirección General de la Función Pública, dependiente de la Consejería de Justicia y Administración Pública. Según fuentes del Gobierno regional, no se entrará a investigar la labor de inspección llevada a cabo por Mata antes de ser nombrada delegada, y por lo tanto no se comprobará si la funcionaria llegó a entender de asuntos que afectaban a su empresa o a las empresas de su socio.

Se da la circunstancia de que el máximo responsable de la inspección de los funcionarios autonómicos en Málaga, la persona que en teoría debía dilucidar si existía incompatibilidad, es el propio esposo de Mata, Juan Jiménez Aguilar, que no actuará en la "información reservada" abierta ayer.

La propia inspectora aseguró el pasado jueves al diario Málaga Hoy, que publicó la noticia, que su situación es "perfectamente legal". El propio consejero de Presidencia de la Junta, Gaspar Zarrías, aclaró ayer que, en principio, "no hay indicios de ningún tipo de incompatibilidad". Zarrías especificó que fue la propia Mata la que dio el paso de renunciar al cargo de delegada a las pocas horas de conocerse su situación. Fuentes de la Junta afirman que la decisión fue "drástica" y que la tomaron conjuntamente la inspectora y sus superiores, que se habían puesto en guardia el mismo miércoles, víspera de la publicación de la noticia.

La segunda investigación sobre este caso la emprenderá la Consejería de Presidencia. En ella se buscará saber "qué ha fallado" en el gabinete jurídico de la Junta para que los responsables políticos, que nombraron a Mata por su "perfil técnico", no conocieran que en el sumario del caso Malaya figuran varias conversaciones de la inspectora urbanística y su socio de enero de 2006. La Junta asegura que ignoraba este extremo a pesar de que tiene acceso a todo el sumario de la causa contra la corrupción en Marbella porque ejerce la acusación particular. Ni Mata ni su socio, Antonio Gijón, han sido imputados en este procedimiento.

Zarrías hizo hincapié en que lo más importante en estos momentos "es que [Mata] ha presentando la renuncia" y que "serán los jueces y los fiscales los que tendrán que actuar si creen que deben hacerlo".