Exploradores de sonidos

El músico británico, aunque afincado desde hace años en Francia, Matt Elliot es algo así como un explorador de sonidos. Él mismo se define como un "estudioso de la geografía musical" y, por eso, aun sin perder sus propias señas de identidad, parece querer redactar cada una de sus nuevas entregas discográficas con una caligrafía distinta. Bajo el nombre de The Third Eye Foundation ensayó con la electrónica más oscura y abrupta, a golpe de drum'n'bass o hip hop instrumental, para virar después hacia un cancionero que escarba en los márgenes del folk y que, por ejemplo, le l...

El músico británico, aunque afincado desde hace años en Francia, Matt Elliot es algo así como un explorador de sonidos. Él mismo se define como un "estudioso de la geografía musical" y, por eso, aun sin perder sus propias señas de identidad, parece querer redactar cada una de sus nuevas entregas discográficas con una caligrafía distinta. Bajo el nombre de The Third Eye Foundation ensayó con la electrónica más oscura y abrupta, a golpe de drum'n'bass o hip hop instrumental, para virar después hacia un cancionero que escarba en los márgenes del folk y que, por ejemplo, le llevó a buscar inspiración en los ritmos tradicionales de la Europa del Este para armar su último álbum en solitario, titulado Failing songs. Tampoco la propuesta de Wildbirds & Peacedrums, dúo sueco integrado por la cantante Mariam Wallentin y el batería Andreas Werliin, suena demasiado convencional. Y eso que su intención es capturar en su música la esencia más pura y primigenia del pop, el blues, el gospel o el soul. Lo hacen, en cualquier caso, a su manera, invocando al espíritu de Bessie Smith o convirtiendo la sencillez y la inmediatez en sus principales argumentos. Su primer elepé se llama Heartcore y andan en estas fechas presentándolo por toda Europa.