Reportaje:

Cuando el 'capitán Jones' desembarcó en Dénia

50 años del primer rodaje de Samuel Bronston en España

Para la Dénia de 1958 aquel fue el acontecimiento más espectacular de todos los tiempos. El productor norteamericano Samuel Bronston eligió la ciudad para rodar su primera película en España, El Capitán Jones, y durante los cuatro meses de duración del rodaje los 12.000 habitantes de aquella Dénia, aún pobre y con las secuelas de la dura posguerra, vivieron en un mundo de ensueño: actores y actrices famosos, decorados de época y cientos de técnicos tomaron el barrio marinero y del castillo. La industria pesada de Hollywood lo cambió todo.

El Capitán Jones contaba la biogra...

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Para la Dénia de 1958 aquel fue el acontecimiento más espectacular de todos los tiempos. El productor norteamericano Samuel Bronston eligió la ciudad para rodar su primera película en España, El Capitán Jones, y durante los cuatro meses de duración del rodaje los 12.000 habitantes de aquella Dénia, aún pobre y con las secuelas de la dura posguerra, vivieron en un mundo de ensueño: actores y actrices famosos, decorados de época y cientos de técnicos tomaron el barrio marinero y del castillo. La industria pesada de Hollywood lo cambió todo.

El Capitán Jones contaba la biografía de uno de los forjadores de la independencia de Estados Unidos, considerado el fundador de la marina de guerra de su país. Fue dirigida por John Farrow, quien se trasladó a España con su mujer, la actriz Maureen O'Sullivan, y sus siete hijos, entre ellos una adolescente Mia Farrow que fue elegida reina de las fiestas de Dénia. Es famosa en la ciudad la fotografía de Farrow subida a una carroza saludando al gentío en un desfile festero. Jones fue interpretado por Robert Stack.

Centenares de vecinos participaron como extras disfrazados de soldados, marineros o piratas en una película que, en aquel momento, fue una de las más caras de la historia del cine. Costó 200 millones de pesetas, destinados en parte a la reproducción exacta de tres fragatas del siglo XVII, una de las cuales amarró en el puerto de Dénia. Muchos marineros dianenses se enrolaron en las tripulaciones estables de esos barcos y recorrieron varios de los países en los que también se rodó la cinta.

Todavía hoy muchas familias son capaces de rememorar el rodaje. La película supuso, además, una inversión extraordinaria y los negocios de muchos vecinos se beneficiaron. Ahora, el Ayuntamiento de Dénia se dispone a celebrar el 50º aniversario del rodaje. Está prevista la colocación de una escultura en Baix la Mar y la inauguración, el 25 de abril, de una exposición que aportará centenares de fotografías, documentos, y objetos cedidos por los vecinos.

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