ELECCIONES 2008 | Campaña electoral

Rajoy alaba la fortaleza del PP aunque le "quiten elecciones legítimamente ganadas"

El aspirante a la Moncloa no admitió preguntas durante su visita a Ourense

Mariano Rajoy mostró ayer en Ourense la amargura de la soledad del PP durante los últimos cuatro años. "Voy a decir lo que siento", anunció en una comida ante cerca de un millar de militantes y simpatizantes de la provincia que pagaron 38 euros por el plato. Y dijo que los cuatro últimos años habían sido "difíciles", que el PP se vio "obligado a defender en solitario la nación de ciudadanos libres e iguales" y que pretendieron excluirles de la vida política. Acto seguido aludió a la militancia, "gente aguerrida, con principios y convicciones, aunque les quiten las elecciones legítimamente gana...

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Mariano Rajoy mostró ayer en Ourense la amargura de la soledad del PP durante los últimos cuatro años. "Voy a decir lo que siento", anunció en una comida ante cerca de un millar de militantes y simpatizantes de la provincia que pagaron 38 euros por el plato. Y dijo que los cuatro últimos años habían sido "difíciles", que el PP se vio "obligado a defender en solitario la nación de ciudadanos libres e iguales" y que pretendieron excluirles de la vida política. Acto seguido aludió a la militancia, "gente aguerrida, con principios y convicciones, aunque les quiten las elecciones legítimamente ganadas". Y se llevó una ovación.

Feijóo llama a la movilización para no perder el tercer diputado orensano
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Por la noche, en Vigo, Rajoy insistió enla misma idea y se comprometió a modificar la ley electoral porque en la ciudad "y en Galicia gobiernan quienes han perdido las elecciones y eso no se puede aceptar en una democracia".

El PP gallego quería ayer, tras el duelo televisado del lunes, una foto de Rajoy en la Estación de Ourense para denunciar "el abandono de las infraestructuras" en Galicia por el PSOE, pero la negativa del ADIF a la celebración del acto público en sus instalaciones forzó un cambio de guión. "Nos han impedido el acto allí para que no comprobemos que todo está como hace cuatro años", denunció el presidente del PP gallego, Alberto Núñez Feijóo. "¡Así es como está la campaña!", exclamó. La ministra candidata por Ourense, Elena Espinosa, tiene a su disposición "mucho dinero y todo el aparato del Estado" y el vicepresidente de la Xunta, Anxo Quintana, sube "a un tren regional para hacerse fotos en la cabina del maquinista".

Con esta queja Feijóo recibió ayer públicamente en Galicia al "gallego que va a gobernar España" y a quien proclamó vencedor del debate con Zapatero.

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Feijóo reprobó el compromiso de Zapatero en el debate de que "el AVE estará en 2020", frente al anuncio del PP de finalizarlo cinco años antes. Después se centró en la opción de futuro de su partido, el Plan Galicia, aprobado en 2003, y al compromiso de Rajoy de recuperarlo. "El debate de ayer fue el de un cerebro contra unas cejas", aseguró para ridiculizar el papel del presidente del Gobierno. "En todas las encuestas el PP ha ganado: la verdadera, la de la soberanía nacional y la libertad, la gana siempre el PP", advirtió.

Tanto en el preámbulo a la declaración de Rajoy ante los medios de comunicación (sin opción a preguntas de los periodistas) como en la posterior comida de militantes, el líder del PP gallego hizo hincapié en las infraestructuras. Primero para referirse a los "imputados por cinco delitos en la adjudicación de la autovía" del Barbanza en contraste con Rajoy "que nunca participó en un gobierno donde hubiera gente imputada". Después, para clamar por el Plan Galicia. "¡Se acabó!" "Zapatero desaprovechó su turno y ahora nos toca a nosotros". "España no puede soportar cuatro años más con el peor presidente de la democracia".

Rajoy, trras acusar a Zapatero de "pactar con los más radicales de los radicales para echar al PP de los grandes consensos nacionales", explicó que estas elecciones "no son las de la derecha contra la izquierda", sino las del "sentido común contra el Gobierno de la ocurrencia: no hay una idea, ni siquiera una ceja". Dicho lo cual conminó a los entregados militantes orensanos a "explicar todo esto a gente que no vota al PP", porque "el reto aquí es el tercer diputado y Ourense nunca ha fallado".

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