Entrevista:GASPAR LLAMAZARES | Candidato de IU a la Presidencia del Gobierno | ELECCIONES 2008 | Entrevista

"IU tiene que conciliar su alma utópica y la pragmática"

Es médico de profesión, y más de un dolor de cabeza se ha tenido que tratar en esta legislatura por los conflictos entre sectores enfrentados de IU. Pero Gaspar Llamazares (Logroño, 1957) sólo piensa ahora en la campaña: el candidato de la tercera fuerza política en número de votos aspira a aumentar sus cinco diputados y, quizás, a entrar en un Gobierno del PSOE tras el 9-M.

Pregunta. En los años 90, IU arrancaba el 10% de los votos. En esta década ha bajado al 5%. Entre los 90 y el nuevo siglo, ¿ha cambiado mucho la sociedad o ha cambiado mucho IU?

Respuesta. Los a...

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Es médico de profesión, y más de un dolor de cabeza se ha tenido que tratar en esta legislatura por los conflictos entre sectores enfrentados de IU. Pero Gaspar Llamazares (Logroño, 1957) sólo piensa ahora en la campaña: el candidato de la tercera fuerza política en número de votos aspira a aumentar sus cinco diputados y, quizás, a entrar en un Gobierno del PSOE tras el 9-M.

Pregunta. En los años 90, IU arrancaba el 10% de los votos. En esta década ha bajado al 5%. Entre los 90 y el nuevo siglo, ¿ha cambiado mucho la sociedad o ha cambiado mucho IU?

"El PSOE dio a mitad de legislatura un giro hacia el centro-derecha"
"Estoy acostumbrado al aliento en la nuca, al examen continuo dentro de IU"

Respuesta. Los años 90 fueron el mejor momento de IU. A partir de 2000 nos recuperamos de un cambio de liderazgo, una crisis interna y una situación económica muy difícil. Desde entonces nos encontramos en un momento de debilidad, pero en esta legislatura hemos recuperado influencia política.

P. ¿Por qué parece que están ustedes siempre enzarzados en conflictos internos?

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R. Nuestra gestión de las diferencias internas es la más democrática de todos los partidos. El problema que tiene IU es que no ha sido capaz de articular bien el pluralismo en la aparición pública, y eso hace parecer el debate interno como confrontación. Tendremos que mejorarlo.

P. ¿Por qué está tan convencido de que el PSOE prefiere pactar con CiU y no con IU?

R. Desde mitad de legislatura estamos ante la negociación de un cambio de programa con sectores de la derecha: la contrarreforma fiscal negociada con CiU, el veto a cambios en materia ambiental, el acuerdo agridulce con la jerarquía eclesiástica...

P. ¿Qué cuestiones serían irrenunciables para un pacto de legislatura con el PSOE?

R. Irrenunciable es una reforma de la Ley Electoral que recupere un principio básico de la democracia: "Un hombre, una mujer, un voto". No puede ser que a IU se le resten dos terceras partes de sus diputados. En segundo lugar, aprovechar el cambio de ciclo económico para cambiar el modelo, que está basado en la construcción. En tercer lugar, recuperar un compromiso que ha borrado el PSOE de su programa: el calendario para la convergencia social con la UE, a través de la mejora de los servicios públicos. En materia de derechos, la ley de plazos en materia de aborto, la muerte digna y el desarrollo de la aconfesionalidad del Estado.

P. ¿Zapatero utilizó a IU en la primera parte del mandato para dar una imagen de izquierdas?

R. Yo creo que Zapatero, inicialmente, tenía la idea de una legislatura progresista, que diese respuesta a las demandas de cambio. Pero a lo largo de la legislatura cambió de caballo.

P. ¿Por interés electoral o porque se arrepintió?

R. Porque percibió que había temas en los que ni su partido ni los poderes económicos y mediáticos a los que él hace oídos le iban a seguir. Ahí lo determinante fue la Ley de Educación y el Estatuto de Cataluña. Vio que debía dar un golpe de timón hacia el centro-derecha y lo dio. Se ha quedado en un presidente reformista. Podía haber sido un presidente de cambio de izquierdas, pero ha desaprovechado esa oportunidad.

P. ¿Fue ingenua IU en 2004 al apoyar a Zapatero en su investidura a cambio de nada?

R. 2004 era una situación excepcional. Nadie le hubiera perdonado a IU que rechazara la investidura después de lo que habíamos combatido al señor Aznar y después del trauma final: la guerra, el 11-M... Y hemos tenido que llevar a cabo una política... yo creo que la única política posible. Mis críticos buscan otras, pero son políticas imposibles; si tuvieran que gobernar esta organización harían mi misma política: conciliar las dos almas que tiene IU: un alma utópica, transformadora, radical, y otra unitaria, pragmática, que busca cambios concretos.

P. Esos críticos de los que habla ocupan la dirección del PCE, partido fundador de IU. ¿Cómo explica ese divorcio entre las direcciones del PCE y de IU?

R. IU es una fuerza política en la que deciden sus militantes. En las asambleas yo sigo teniendo mayoría. Y en las primarias he tenido una mayoría muy sólida.

P. ¿No tiene la sensación de estar pasando un examen continuo en su propia casa?

R. Sí, pero estoy acostumbrado. Al aliento en la nuca, al examen continuo... Cualquier dirigente de esta organización tiene que asumirlo como parte de su dirección política.

P. Si IU no logra los cinco diputados que le permiten formar grupo, ¿qué pasará con su liderazgo después del 9-M?

R. No me planteo un debate de liderazgo. Yo he sido respaldado con más fuerza que el resto de dirigentes de este país: a mí me ha respaldado mi militancia.

P. ¿IU respalda la convocatoria de referéndum de Ibarretxe?

R. Es una iniciativa legítima que tiene cauce en la Constitución, como la ha tenido el referéndum en Andalucía o el de Cataluña. No hay por qué rasgarse las vestiduras, sino darle cauce constitucional. Sólo faltaría que además de que una propuesta se rechace porque sea violenta ahora rechacemos una propuesta porque quiera ir más allá de la Constitución. Esa propuesta del lehendakari es debatible, encauzable, y en nuestro país cabe el derecho a decidir de los vascos.

P. ¿En qué parte de la Constitución cabe el derecho a decidir de los vascos unilateralmente?

R. Bueno, como el de los andaluces o el de los catalanes, ¿no? Es el mismo. La propuesta de Ibarretxe es: diálogo con el Estado, derecho a decidir y reforma del Estatuto. Eso, con ese orden o con otro, tiene cauce en la Constitución. ¿Por qué lo hacen así? Porque tienen la experiencia del anterior Estatuto, que no tuvo cauce: fue derrotado en la Cámara. Buscan otra salida. Yo no me voy a rasgar las vestiduras porque el Gobierno vasco haga esa propuesta.

P. Los referendos sobre los Estatutos de Cataluña y Andalucía se celebraron porque ése es el procedimiento que fija la ley: se refrenda la decisión de las Cortes. En el caso del plan Ibarretxe, el referéndum se quiere convocar al margen de las Cortes y justamente porque las Cortes no aceptaron ese plan. ¿No hay que rasgarse las vestiduras?

R. Una negociación puede dar lugar a que el Gobierno del Estado permita un referéndum en Euskadi. Existen muchos mecanismos, dentro de cauces parlamentarios, que pueden dar salida a esa propuesta. Lo que es negativo es estigmatizar.

P. Pero si Ibarretxe lo convocara sin permiso del Estado...

R. No estaríamos de acuerdo. Pero quiero recordar que una consulta no es un referéndum. El Gobierno vasco plantea: negociación, consulta, Estatuto y referéndum. La consulta, en principio, no es un referéndum.

P. ¿Le parece bien que ANV y PCTV sigan en las instituciones si se demuestra su vinculación con Batasuna y ETA?

R. Si se demuestra judicialmente que son ETA, acataremos la sentencia como hemos hecho siempre. Pero no estamos de acuerdo con la aplicación de la ley de ilegalización de partidos. Es un obstáculo a la paz.

Entrevista realizada por Juan Antonio Carbajo (España), Miguel Jiménez (Economía), Luis Prados (Internacional) y Vera Gutiérrez Calvo (España).

Gaspar Llamazares, durante la entrevista en su despacho de la sede de IU.BERNARDO PÉREZ

ECONOMÍA. "Las políticas de Solbes y las de Pizarro no son muy diferentes"

Pregunta. Ustedes no sólo no proponen rebajas fiscales sino que promueven la creación de nuevos impuestos. ¿No es eso disuasorio para el electorado?

Respuesta. No lo creo. En un país donde los impuestos sobre las rentas más altas son muy inferiores al resto de la UE, y el 80% de los impuestos los sufragan los asalariados, es de justicia que haya más equilibrio impositivo. Pero nuestra principal propuesta es la lucha contra el fraude fiscal. Con la persecución del fraude, y no haciendo rebajas fiscales frívolas, podríamos afrontar el cambio de modelo económico y tener un Estado del Bienestar. Ahora tenemos un Estado del Medioestar.

P. Para luchar contra el fraude plantean crear un registro de billetes de 500 euros. ¿Cómo se concretaría eso? Cuando alguien recibiera un billete de 500, ¿debería ir a ese registro a apuntarse?

R. Sería un registro de los lugares donde hay cantidades de billetes de 500 euros. Tenemos más billetes de 500 que el resto de la UE. De todas formas hay otras medidas más concretas en el programa. La principal, cambiar la Agencia Tributaria para mejorar la inspección. Y centrarse en las fuentes de fraude fundamentales: el IVA, la importación de productos de lujo, la construcción...

P. Piden limitar el crédito hipotecario al 30% de los ingresos y a 15 años. La hipoteca media es hoy de unos 25 años. ¿No cree que eso cerraría el acceso a la vivienda a la mayor parte de las familias?

R. No, justo lo contrario. Las subvenciones que hay en nuestro país al comprador y estas hipotecas a largo plazo lo que han hecho es beneficiar al banco y al promotor, nunca al ciudadano; han encarecido enormemente los precios. Planteamos limitar las hipotecas y que, en vez de subvenciones indiferenciadas a todos los ciudadanos para comprar pisos, haya una inversión directa en vivienda pública. Es lo que se hace en Europa.

P. ¿Pizarro y Solbes son lo mismo?

R. En su política económica no son muy diferentes. Ahora bien, Solbes es un señor conservador dentro de lo que es el centro-izquierda. Y el señor Pizarro es lo menos recomendable para ministro de Economía de un país, una persona que se ha enriquecido con el dedo de la privatización de una empresa pública.

POLÍTICA EXTERIOR. "No sé qué tiene que ver Kosovo con Euskadi"

Pregunta. ¿Cuál es la posición de IU ante la reciente independencia de Kosovo?

Respuesta. Hay que respetar el derecho de autodeterminación. Ahora bien, el caso de Kosovo no es una autodeterminación sino la voladura final de un Estado con ayuda inestimable de los EE UU y de la UE. Estamos ante la última consecuencia de un error político en Yugoslavia.

P. ¿Y no se contradice esa postura con el hecho de que IU forme parte del Gobierno vasco, que el mismo día de la independencia de Kosovo hizo una declaración de apoyo?

R. No sé qué tiene que ver una cosa con la otra. La declaración del Gobierno vasco me pareció un error, pero no sé qué tiene que ver Kosovo y los Balcanes con Euskadi y España. Nunca IU ha asimilado una cosa con la otra.

P. Dice en su programa que "sólo a los cubanos corresponde determinar su futuro". ¿Es una ironía o va a pedir elecciones democráticas en Cuba mañana mismo?

R. No se ayuda a la evolución de Cuba con la injerencia. El respeto y la colaboración con el pueblo y el Gobierno cubano es la mejor forma de favorecer esa evolución. Los cubanos tienen procesos de decisión en su país, y nosotros los respetamos.

P. IU pide retirar las tropas de Afganistán, pero está a favor de la reconstrucción de ese país, y la OTAN está en esa reconstrucción.

R. Estamos contra el envío de tropas a Afganistán y a favor en Líbano. Porque en Líbano hay un proceso de interposición, con cascos azules de la ONU, y en Afganistán hay un proceso de reconstrucción y otro de guerra, dirigida por EE UU. No es compatible la guerra con la reconstrucción. Afganistán, o bien se estabiliza con sus distintos componentes, incluidos los talibanes, y con su entorno, o nunca será estable. Será un protectorado de Estados Unidos.

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