Reportaje:DISCOS

Mina con aire flamenco

Con Diego El Cigala, con Serrat o Chico Buarque, la diva italina recrea catorce canciones en Todavía

Mina Mazzini, la diva de la música popular italiana, ha editado un nuevo disco. Todavía recrea catorce canciones que ya fueron éxitos de la artista y que ahora suenan en español, salvo una que interpreta en portugués. Después de casi cincuenta años de vida artística, ochenta álbumes con más de 1.200 canciones grabadas, doce películas filmadas e innumerables apariciones en televisión, Mina se mantiene activa y a un nivel más que aceptable. La mitad de las canciones de Todavía son dúos con artistas tan diferentes como Tiziano Ferro, Diego Torres, Miguel Bosé, Serrat, El Cigala, Chi...

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Mina Mazzini, la diva de la música popular italiana, ha editado un nuevo disco. Todavía recrea catorce canciones que ya fueron éxitos de la artista y que ahora suenan en español, salvo una que interpreta en portugués. Después de casi cincuenta años de vida artística, ochenta álbumes con más de 1.200 canciones grabadas, doce películas filmadas e innumerables apariciones en televisión, Mina se mantiene activa y a un nivel más que aceptable. La mitad de las canciones de Todavía son dúos con artistas tan diferentes como Tiziano Ferro, Diego Torres, Miguel Bosé, Serrat, El Cigala, Chico Buarque o el jugador del Inter de Milán, Javier Zanetti. La versatilidad de su estilo y su diversidad de registros vocales, le ha permitido afrontar en este disco canciones con aires flamencos junto a El Cigala -Un año de amor- un intérprete al que no conocía y con cuya voz quedó fascinada; atmósferas soul con Ferro - Cuestión de feeling -, ritmos de bolero con Serrat -Sin piedad-, recuerdos brasileños con Buarque -Valsinha- y sonidos de cosecha propia con Bosé - Agua y sal-, Torres -Corazón felino- o en solitario, con arreglos musicales muy actuales. Arropada por una instrumentación de batería, bajo y guitarras (eléctrica y española) a las que se incorporan el piano, las cuerdas o coros según demanda la canción, la voz de Mina se impone atemperada por su técnica y recursos, con ese estilo tan peculiar que convierte las canciones que interpreta en clásicas. La grandeza de Mina es tal que junto a ella -y a pesar de que ninguno de los artistas ha coincidido con ella en el estudio de grabación-, los músicos consagrados se crecen y los que son aficionados -como Zanetti, que recita Parole, parole con una ingenuidad que apuntala la falsedad del discurso-, parecen profesionales.

Todavía se cuenta como la cita anual con sus innumerables fans a la que Mina acude puntualmente, desde su casa de Lugano (Suiza) en la que permanece recluida desde hace cerca de treinta años. cuando decidió desaparecer de la vida pública. No concede entrevistas, ni participa en la promoción de sus discos pero mantiene una colaboración semanal con el periódico La Stampa y la revista Vanity fair. Catorce canciones de amor y, sobre todo, de desamor, que permiten a las nuevas generaciones conocer a una de las artistas más grandes que ha dado Italia en los últimos años de canción popular. Disco para escuchar, sentir y admirar. -

La cantante italiana Mina, en 1970.

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