Un cicloturista mató a un hombre porque le vetó el paso

El excursionista se apoderó del vehículo de la víctima y la arrolló

Un hombre acusado de arrollar con una furgoneta y luego matar con un extintor al propietario de una finca en Sant Vicent del Raspeig admitió ayer ante el tribunal los hechos. El procesado, David González, justificó la agresión porque la víctima le negó el paso por su finca mientras practicaba senderismo en bicicleta. Al término del juicio, el fiscal elevó su petición de pena de 12 a 18 años por un delito de asesinato y un año más por incendio. El ministerio público considera que actuó con "alevosía".

Los hechos ocurrieron el 8 de julio de 2005, cuando el procesado circulaba en bicicleta...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

Un hombre acusado de arrollar con una furgoneta y luego matar con un extintor al propietario de una finca en Sant Vicent del Raspeig admitió ayer ante el tribunal los hechos. El procesado, David González, justificó la agresión porque la víctima le negó el paso por su finca mientras practicaba senderismo en bicicleta. Al término del juicio, el fiscal elevó su petición de pena de 12 a 18 años por un delito de asesinato y un año más por incendio. El ministerio público considera que actuó con "alevosía".

Los hechos ocurrieron el 8 de julio de 2005, cuando el procesado circulaba en bicicleta por el paraje Finca Chirau, propiedad de José Fuentes. Al llegar a las inmediaciones de la finca, la víctima le advirtió de que no entrara en su propiedad. David hizo caso omiso. Entonces, el dueño sacó un extintor con el que le amenazó con el ánimo de que se alejara de la zona. Sin embargo, el cicloturista le arrebató el extintor y le propinó un golpe frontal en el cráneo. El anciano cayó al suelo moribundo. Luego, David se subió en la furgoneta del anciano, hizo marcha atrás y lo arrolló al menos en una ocasión hundiéndole el tórax. A continuación, detuvo el vehículo y, al comprobar que todavía estaba con vida, cogió de nuevo el extintor con el que le golpeó hasta cinco veces en la cabeza acabando con su vida. David, tras apoderarse de los 210 euros que llevaba en la cartera la víctima huyó del lugar en la furgoneta. Más tarde, quemó el vehículo, se cambió de ropa y se fue de fiesta a un prostíbulo.

En su declaración, el acusado admitió que golpeó al anciano con el extintor y le arrolló con la furgoneta, aunque precisó que lo hizo por miedo a que la víctima le agrediera con una escopeta.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Archivado En