La policía podrá poner camisas de fuerza a inmigrantes durante la expulsión

El protocolo de repatriación establece medidas para evitar autolesiones

La policía podrá meter en camisas de fuerza y poner casco a los inmigrantes expulsados por vía aérea. Así figura en el protocolo de repatriación que ha elaborado el Ministerio del Interior para delimitar las medidas que pueden adoptar los policías en dichos vuelos. El objetivo es evitar que se repita un caso como el de Osamuyia Aikpitanhi, el nigeriano que murió en junio cuando era repatriado maniatado y amordazado en un vuelo comercial.

El protocolo, al que ha tenido acceso EL PAÍS, señala que todos los inmigrantes llevarán un informe médico y que el jefe del dispositivo policial podr...

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La policía podrá meter en camisas de fuerza y poner casco a los inmigrantes expulsados por vía aérea. Así figura en el protocolo de repatriación que ha elaborado el Ministerio del Interior para delimitar las medidas que pueden adoptar los policías en dichos vuelos. El objetivo es evitar que se repita un caso como el de Osamuyia Aikpitanhi, el nigeriano que murió en junio cuando era repatriado maniatado y amordazado en un vuelo comercial.

El protocolo, al que ha tenido acceso EL PAÍS, señala que todos los inmigrantes llevarán un informe médico y que el jefe del dispositivo policial podrá suspender la expulsión si no se garantiza "un traslado digno y seguro".

Los inmigrantes "podrán ser inmovilizados por medios que no pongan en peligro su integridad física ni comprometan sus funciones vitales" y que, en todo caso, "respeten su honor y dignidad", lo que incluye el uso de "cascos de autoprotección para los repatriados violentos, que impidan que se autolesionen", así como "cinturones y prendas inmovilizadoras autorizadas".

Según el protocolo elaborado por Interior, los policías que vayan en cada vuelo tendrán que ser "por lo menos" tantos como los expulsados, más un contingente de reserva para los "destinos muy lejanos". Los policías, que no podrán llevar armas de fuego dentro de la aeronave, tienen prohibido bajar en los aeropuertos subsaharianos y, "en la medida de lo posible, se evitará [también] que las autoridades locales suban a bordo".

Las expulsiones por vía aérea han aumentado espectacularmente. En lo que va de año han sido repatriados 4.630 inmigrantes en 123 vuelos especiales y otros 3.900 en vuelos comerciales.

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