DESDE MI SILLÓN | TOUR 2007

Psicosis

Un día más los supervivientes de este Tour se disponen a alcanzar la pancarta que anuncia el kilómetro 0. Se trata de 168 corredores que toman la salida a las 12.58 en Montpellier, y que llegarán a Castres después de 178,5 kilómetros. Deberán superar cuatro cotas puntuables para el gran premio de la montaña, la última de ellas de segunda categoría.

Esto (o algo parecido) es lo que se oiría ayer por radio vuelta en las emisoras de los coches de los equipos. ¿Un día más? No, ayer no fue un día más. Quizá para alguno sí, pero no para el dorsal 58. Y no precisamente porque fuese el l...

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Un día más los supervivientes de este Tour se disponen a alcanzar la pancarta que anuncia el kilómetro 0. Se trata de 168 corredores que toman la salida a las 12.58 en Montpellier, y que llegarán a Castres después de 178,5 kilómetros. Deberán superar cuatro cotas puntuables para el gran premio de la montaña, la última de ellas de segunda categoría.

Esto (o algo parecido) es lo que se oiría ayer por radio vuelta en las emisoras de los coches de los equipos. ¿Un día más? No, ayer no fue un día más. Quizá para alguno sí, pero no para el dorsal 58. Y no precisamente porque fuese el líder de la carrera, que lo es. No, para Rasmussen era un día muy especial, un día duro en lo extradeportivo. Porque en lo deportivo, bastante le quitará el sueño la contrarreloj de Albi, pero ésa es otra historia.

La federación danesa había comunicado que excluía a Rasmussen de la participación en el equipo nacional por no haber indicado a las autoridades antidopaje dónde se encontraba durante sus entrenamientos. Quizá la federación danesa esté al tanto de la actualidad política en España, no lo sé, donde tanto se habla de la memoria histórica. Si no, ¿por qué hicieron pública la noticia ayer cuando estos incidentes fueron en mayo y a finales de junio? Yo no tengo la respuesta, pero algún interés oculto habrá en seguir alimentando a la psicosis que rodea a este deporte.

El caso es que el Tour tuvo que convocar una rueda de prensa para decir lo obvio, que el corredor no tiene ningún problema para continuar en carrera, y que ya había sido advertido por sus faltas. Y Rasmussen sabe tan bien como yo que tres advertencias significan un positivo.

A ver, yo no sé ni lo que ha pasado ni ha dejado de pasar con Rasmussen. Yo lo que sé es que todos los corredores tenemos que enviar rellenado a la UCI cada tres meses el "formulario de localización de los ciclistas". Allí yo tengo que indicar todos mis datos más los de otra persona que me pueda localizar en cualquier circunstancia -¿?-. Después tengo que indicar las carreras en las que participaré, las direcciones temporales en las que me hospedaré y los horarios de mis entrenamientos. Señores de la UCI: no tengo ni la más mínima idea de qué va a ser de mí mañana, así que, qué diré dentro de tres meses. Esta tarde, por ejemplo, estoy pensando ir al cine. Qué hago, ¿les mando un fax? Porque me juego tener una advertencia. Quizá sea mejor que den un paso más y a partir de ahora nos indiquen dónde hay que entrenarse, cómo y cuándo. Sería así más fácil para todos.

Por cierto, para otros fue un día más. Y ganó Boonen.

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