"Cada vez hay más discriminación y racismo"
Willy Quintero nació en Bello (Colombia) en 1965. A Bilbao llegó en el año 2000 como inmigrante privilegiado, es decir, no económico. Desde su trabajo en una universidad colombiana como profesor de técnicas de la comunicación se había conectado vía Internet con un programa de doctorado de la UPV. "Me marché para estudiar", reconoce.
Sin embargo, su vida estaba amenazada por la guerrilla colombiana debido a su compromiso político. "Trabajé como jefe de prensa para el senador José Ignacio Mesa Betancourt, del Partido Liberal Independiente", precisa.
A Bilbao llegó con su compañera ...
Willy Quintero nació en Bello (Colombia) en 1965. A Bilbao llegó en el año 2000 como inmigrante privilegiado, es decir, no económico. Desde su trabajo en una universidad colombiana como profesor de técnicas de la comunicación se había conectado vía Internet con un programa de doctorado de la UPV. "Me marché para estudiar", reconoce.
Sin embargo, su vida estaba amenazada por la guerrilla colombiana debido a su compromiso político. "Trabajé como jefe de prensa para el senador José Ignacio Mesa Betancourt, del Partido Liberal Independiente", precisa.
A Bilbao llegó con su compañera y allí nació su hijo, que hoy tiene cinco años. Su intención era permanecer sólo un año, pero sigue en la capital vizcaína. "No he terminado aún el ciclo de cosas que tengo que hacer aquí", dice. Su trabajo en Euskadi tiene que ver "con el asociacionismo". Recuerda haber encontrado las cosas muy diferentes a su llegada. "Hay discriminación y racismo. Lo veo y cada vez más", destaca.
Su opinión sobre la condición actual del extranjero no comunitario es pesimista: "Hay un empeoramiento de la situación de la inmigración, como si no se avanzara, pero la gente sigue viniendo y va a ser necesario que la sociedad cambie y los políticos tomen cartas en serio".
Los colombianos, dice, eligen España por el idioma, pero opina que entre 2002 y 2005 se ha ralentizado el flujo de inmigrantes de su país. "Tres millones de familias en Colombia viven de las remesas, del dinero que envían los emigrados y eso es terrible".