Los marineros enviados a Líbano piden que se les incluya en la misión de paz

Defensa alega para no computarlos que los barcos sólo transportan las tropas

Los marineros de los buques que apoyan al contingente español en Líbano han trasladado a sus mandos su inquietud por el hecho de que no se les considere parte de la misión de paz. Esta reivindicación tiene importantes efectos económicos para ellos, pues la prima que percibirían sería el doble de la que cobran. El problema es que, si se atendiera su demanda, la cifra de efectivos implicados en Líbano superaría los 1.100 aprobados por el Congreso. El Ministerio de Defensa alega que el papel de los buques se limita a trasladar a las tropas y regresar, por lo que no participan en la operación.
...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

Los marineros de los buques que apoyan al contingente español en Líbano han trasladado a sus mandos su inquietud por el hecho de que no se les considere parte de la misión de paz. Esta reivindicación tiene importantes efectos económicos para ellos, pues la prima que percibirían sería el doble de la que cobran. El problema es que, si se atendiera su demanda, la cifra de efectivos implicados en Líbano superaría los 1.100 aprobados por el Congreso. El Ministerio de Defensa alega que el papel de los buques se limita a trasladar a las tropas y regresar, por lo que no participan en la operación.

De los cuatro buques que llegaron el pasado viernes a Líbano, uno de ellos, el Pizarro, regresó el domingo tras desembarcar en Beirut a los 76 miembros de la avanzadilla de la brigada de la Legión. El barco navega hacia Valencia, donde está previsto que cargue material y regrese a Líbano.

Los otros tres barcos, el buque de asalto anfibio Galicia, el buque de apoyo logístico Patiño y la fragata Almirante Juan de Borbón navegan frente a las costas libanesas. El Galicia se aproximó ayer al puerto de Naqura, sede del mando de la Fuerza Interina de Naciones Unidas en Líbano (FINUL), para desembarcar, a través de lanchas y helicópteros, pertrechos y provisiones para el batallón de la Infantería de Marina instalado en Taibe, junto a la frontera israelí. El contraalmirante José Francisco Palomino explicó que los barcos permanecerán en la zona hasta que las tropas españolas sean autosuficientes y luego regresará a España, aunque no pudo precisar la fecha. Palomino declaró que, hasta que se produzca la transferencia de autoridad a la FINUL del batallón de marines, él es el máximo responsable español de la operación. Sin embargo, aseguró desconocer si él y los marineros embarcados en los buques se incluyen en la operación desde el punto de vista presupuestario. El personal a su mando le ha planteado la misma pregunta, sin obtener tampoco respuesta.

El asunto tiene importancia para los 600 marineros que viajan a bordo de los tres buques y para los 200 tripulantes del Pizarro. Cuando navegan por aguas internacionales, los marineros reciben una prima diaria que puede llegar al 175% del sueldo básico y trienios si viajan a países de fuera de la UE. En cambio, cuando participan en operaciones de paz la prima se duplica. Para un marinero, la diferencia puede suponer más de 20 euros diarios.

Fuentes del Ministerio de Defensa recordaron ayer que, tal como explicó el ministro José Antonio Alonso en el Congreso, la misión de los buques se limitaba a trasladar al batallón de Infantería de Marina y regresar luego a España, por lo que no forman parte de la operación de paz. Las citadas fuentes indicaron que este mismo criterio se aplicó en anteriores misiones, como la desarrollada en Haití.

Más allá de la reivindicación económica, la cuestión de fondo es el límite de 1.100 militares aprobado por el Congreso para la operación en Líbano y el tope de 3.000 efectivos que se autoimpuso el Gobierno para el conjunto de operaciones en el exterior. Este último cupo opera como el máximo que el Ministerio de Economía y Hacienda se ha comprometido a pagar con cargo a la partida 228, un crédito ampliable al margen del presupuesto de Defensa.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Si los marineros se incluyeran en el cómputo global, se superaría el límite de los 1.100 y también el de los 3.000, ya que el Gobierno apuró al máximo el margen que restaba de la suma de todas las demás operaciones militares en el exterior (Bosnia, Kosovo, Afganistán y Congo).

Cascos azules españoles junto a soldados del Ejército libanés, en el puerto de Naqura.ULY MARTÍN

Sobre la firma

Archivado En