Freno en máximos

Los niveles máximos alcanzados durante agosto, el temor a la inflación, y con ello a una posible subida de los tipos en Estados Unidos, provocaron tres jornadas consecutivas de descensos. No obstante, las pérdidas fueron moderadas y al final el Ibex 35 logró mantener el nivel de los 12.000 puntos.

El mes de septiembre se estrenó en la renta variable española con pérdidas a la vista de los niveles máximos alcanzados por el Ibex 35. Los inversores no quisieron perder la oportunidad de recoger algunos de los beneficios acumulados a lo largo del mes de agosto, lo que llevó a las bolsas a fi...

Los niveles máximos alcanzados durante agosto, el temor a la inflación, y con ello a una posible subida de los tipos en Estados Unidos, provocaron tres jornadas consecutivas de descensos. No obstante, las pérdidas fueron moderadas y al final el Ibex 35 logró mantener el nivel de los 12.000 puntos.

El mes de septiembre se estrenó en la renta variable española con pérdidas a la vista de los niveles máximos alcanzados por el Ibex 35. Los inversores no quisieron perder la oportunidad de recoger algunos de los beneficios acumulados a lo largo del mes de agosto, lo que llevó a las bolsas a finalizar en negativo a lo largo de tres sesiones. En la semana, el Ibex se anotó un descenso del 0,91%, cerró en los 12.081,70 puntos, y ya en lo que va de año obtiene una revalorización del 12,56%.

En la jornada del lunes, los mercados estrenaron la semana con cierto optimismo que llevó al selectivo español a lograr un nuevo récord del ejercicio en los 12.278,60 puntos. A partir de ese nivel, las ventas comenzaron a presionar en numerosos valores que ya se prestaban a recoger las plusvalías generadas. El sector bancario fue uno de los que sufrieron el peso de las ventas, y muy especialmente BBVA que en algunas jornadas tuvo que pagar los excesos de las subidas acumuladas.

El ambiente optimista mantenido a lo largo de varias semanas se vio también truncado por los datos económicos que llegaban del exterior. El temor a la inflación en Estados Unidos, y con ello a posibles subidas de los tipos de interés por parte de la Reserva Federal, provocó cierto nerviosismo entre los inversores que optaron por retirar posiciones a la espera de un panorama más tranquilo. En los próximos días la atención estará puesta en los datos económicos que se vayan conociendo y que den nuevas pistas respecto a la marcha de la economía, tanto en Estados Unidos como en Europa.

Mientras esto se conoce, las bolsas optaron en la jornada del viernes por volver a comprar a la vista, también, de una apertura positiva de Wall Street. El fondo del mercado es positivo, muchos analistas siguen apostando por subidas hasta finales de año por lo que también es normal que en los niveles actuales se produzcan correcciones para poder entrar a precios más atractivos.

El petróleo dio a los mercados nuevas dosis de optimismo al registrar un importante descenso en su precio. Después de mucho tiempo con fuertes subidas, la cotización del crudo mantuvo una trayectoria a la baja a lo largo de las cinco jornadas. En la sesión del viernes el barril de crudo brent cotizaba por la tarde en los 66,22 dólares, lejos de los máximos del mes de agosto en que el precio llegaba a los 78 dólares.

Las cifras de contratación ya comienzan a ser mayores que las registradas en agosto. La actividad en el mercado continuo rondó una media diaria de 2.500 millones de euros.