Reportaje:Alemania 2006 | La España de toda la vida

Luis medita la dimisión

El seleccionador insiste en que fue un fracaso caer eliminados en octavos y se atribuye la máxima responsabilidad

La selección española se retiró de Alemania diez horas después de haber quedado eliminada. Rezagado a la retaguardia de la comitiva marchó su hombre más triste. No era otro que el seleccionador Luis Aragonés, el mismo que había repetido que acudía al Mundial para ganarlo. Ayer caminó preferentemente solo por el aeropuerto de Dortmund, arrastrando su carrito del equipaje con el pescuezo doblado y la mirada vidriosa de los estados febriles. En su cabeza se consolida la idea de abandonar su cargo como seleccionador de España.

"Tengo el enfado propio de no haber llegado adonde quería", dijo...

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La selección española se retiró de Alemania diez horas después de haber quedado eliminada. Rezagado a la retaguardia de la comitiva marchó su hombre más triste. No era otro que el seleccionador Luis Aragonés, el mismo que había repetido que acudía al Mundial para ganarlo. Ayer caminó preferentemente solo por el aeropuerto de Dortmund, arrastrando su carrito del equipaje con el pescuezo doblado y la mirada vidriosa de los estados febriles. En su cabeza se consolida la idea de abandonar su cargo como seleccionador de España.

"Tengo el enfado propio de no haber llegado adonde quería", dijo. "Me voy con la conciencia tranquila. Pero soy el máximo responsable de la expedición y estoy preocupado por no haber conseguido los logros que nos propusimos".

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El encanto de Luis Aragonés reside en el modo cabal en que comparte con el público las contradicciones que le llevan en volandas. Desde que asumió el cargo, tras la Eurocopa de 2002, el técnico insistió en que dimitiría si no era capaz de clasificar a España para las semifinales del Mundial. Tras quedar eliminado ante Francia en octavos, el martes pasado en el estadio de Hannover, se presentó con un discurso ambiguo: "Seguiré si el pueblo me quiere".

Antes del partido, el seleccionador recordó que su objetivo era colocar a España "entre las selecciones que han ganado el Mundial". Ninguna de esas selecciones, a excepción de Uruguay, que no estuvo en la fase final, ha quedado eliminada en los octavos. Brasil, Alemania, Italia, Argentina, Inglaterra y Francia alcanzaron los cuartos. Con este dato agitándose en su cabeza Luis Aragonés se mostró desasosegado. Insinuó que piensa en dimitir: "Yo ya dije lo que iba a hacer si pasaba lo que ha pasado. Es cuestión de esperar unos días y de ver las cosas. Pero lo normal es que pase lo que ya sabéis. No tengo que repetirlo mil veces. Lo normal es lo normal".

El técnico hizo lo posible porque se le viera como a un hombre libre. "No me siento esclavo de mis palabras", comentó en un momento. Luego dejó caer que le "apetecería hacer otras cosas". Dio la sensación de que quiere anunciar su decisión sin que parezca que lo hace porque no le queda más remedio. Ayer en Dortmund, mientras buscaba el avión, procuró no ser explícito. Pero dio pistas. Las mismas señales que anuncian sus equipos titulares y que luego no fallan. Emplazó a la prensa para dentro de unos días. Entonces anunciará su decisión. Si las insinuaciones no engañan, su tiempo al frente del equipo nacional se ha terminado.

"Como máximo responsable de la selección", declaró, "soy el máximo culpable de que nos vayamos tan pronto del Mundial. Lo que se ha hecho bien está bien, y lo mal está mal. Que yo seguiré entrenando no hay duda. Es mi profesión. Que siga en la selección es cuestión de saber cómo se quieren hacer las cosas. Es cuestión de palpar. Pero yo no quiero hablar de eso. Ahora lo que interesa es que nos han echado del Mundial y el máximo responsable soy yo".

"Yo dije lo que he dicho", prosiguió, siempre elíptico. "Yo no he cambiado de discurso. Digo que no es el momento . Mientras la selección no consiga llegar a una final los otros resultados son un fracaso para el fútbol español".

Tras asumir su fracaso, Luis Aragonés evaluó el partido contra Francia y reconoció que España cometió un error táctico al no rebajar su impulso atacante después de abrir el marcador. "Nosotros no les tiramos pero ellos tampoco nos tiraron a nosotros entre los tres palos", apuntó. "Hubo un uno para uno en el primer gol y un tiro de cabeza en el segundo. El tercero no cuenta porque el partido estaba resuelto. Nosotros hicimos mal una cosa. Con el 1-1 deberíamos haber jugado a la contra y cerrar el partido".

El seleccionador español, Luis Aragonés, rodeado de periodistas en el aeropuerto de Dortmund.RICARDO GUTIÉRREZ

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