"Una oportunidad única"

Huidizo nada más llegar a Alemania, a disgusto como suplente, a Raúl se le ha puesto cara de capitán desde que supo que será titular en los octavos de final. Hoy, día de su 29º cumpleaños, tiene la oportunidad de encumbrar a España a costa de eliminar a Francia, una victoria que supondría, por lo demás, el último partido que disputaría Zidane, ya que ha anunciado su retirada en cuanto acabe su participación en el torneo. Un paisaje que invita al optimismo a Raúl, que todavía recuerda el penalti que falló ante Barthez en la Eurocopa de 2000 por más que lo niegue.

"Aquello ya pasó", advie...

Huidizo nada más llegar a Alemania, a disgusto como suplente, a Raúl se le ha puesto cara de capitán desde que supo que será titular en los octavos de final. Hoy, día de su 29º cumpleaños, tiene la oportunidad de encumbrar a España a costa de eliminar a Francia, una victoria que supondría, por lo demás, el último partido que disputaría Zidane, ya que ha anunciado su retirada en cuanto acabe su participación en el torneo. Un paisaje que invita al optimismo a Raúl, que todavía recuerda el penalti que falló ante Barthez en la Eurocopa de 2000 por más que lo niegue.

"Aquello ya pasó", advierte; "espero que ahora sea diferente, sobre todo por lo que respecta al resultado. Si hay que fallar un penalti y España gana, pues... se fallará". "A mí me interesa el equipo porque empiezan los partidos de verdad", anuncia el máximo goleador en la historia de la selección (44 tantos en 97 partidos) y aspirante a convertirse en el futbolista español con más goles en las fases finales del Mundial (suma cinco). "Queremos demostrar ante los grandes que aspiramos a ganar la Copa", prosigue, atrevido y valiente, en la línea del mensaje del plantel español.

"Los franceses suelen responder en partidos exigentes. Pero podemos hacerles mucho daño"

"Todos nos sentimos conformes con la manera de jugar. Somos un gran plantel. Lo probaremos"

"Todos deseamos el éxito de la selección y este equipo tiene argumentos para conseguirlo", subraya el madridista. "Es una oportunidad única. Estamos mentalizados. Vamos a trabajar, a dar más del ciento por ciento y a soñar que puede ser el momento. Todos nos sentimos conformes con la manera de jugar. Somos un gran plantel y lo vamos a demostrar", insiste. "Francia ya ha sido campeona mundial y europea y nosotros nada. Queremos ser como ellos. Esa ambición, ilusión y ganas nos tiene que hacer dar más que ellos y ser superiores".

Rodeado de Puyol y de Xabi Alonso en una comparecencia que expresó la importancia que da la selección española al partido, Raúl no necesitó que ningún compañero intercediera en su apoyo como ocurrió en la previa ante Ucrania con el capitán barcelonista.

La conferencia de prensa de los futbolistas fue sobre todo un monólogo de Raúl. "El actual grupo de jugadores es el que más calidad tiene de todos en los que he estado", argumenta después de recordar que disputa su tercer Mundial y que la afición se ha enganchado al equipo; "tiene mucho talento. Mezcla jugadores que ya han participado en otras fases finales con jóvenes muy buenos. Hay que soñar en que es el momento, en que puede ser el Mundial de España".

No hay futbolista que no repita las mismas palabras cuando se le demanda por las claves de los partidos, y menos Raúl: "Los franceses tienen jugadores peligrosos en el medio campo y en la delantera. Acostumbran a responder en partidos exigentes como el próximo. Pero nosotros sabemos que podemos hacerles mucho daño. Hemos apostado por tener el balón y, si lo conservamos y movemos rápido, podemos ganarles".

La victoria española supondría la retirada de Zidane del fútbol, un asunto del que pretenden desmarcarse los internacionales de Luis. "Si acaso, se va a jubilar él, aunque yo creo que está para jugar más tiempo", explica Luis Aragonés. "Yo prefiero que jueguen los buenos", corrobora Raúl; "ojalá que sea el último partido de Zidane por el bien de España".

No sería el último de Raúl en caso de derrota española. "Espero seguir y disputar más campeonatos, aunque ahora hay que mirar el presente", razona; "no se me pasa por la cabeza decir adiós a la selección ni me siento como si estuviera ante una última oportunidad". El capitán español no le tiene ningún temor a un encuentro en el que corre el riesgo de asumir un protagonismo desmedido y también repetido. No hay término medio que valga con Raúl. "Desde los 17 años convivo con la responsabilidad", recuerda; "hay que estar siempre preparado y yo lo estoy. El seleccionador ha buscado lo mejor para cada partido". Y Luis le da la razón: "Raúl ha jugado en todos los encuentros. Lo que pasa es que entendía que no estaba para aguantar 90 minutos y prefería darle entrada cuando el rival estuviera más desgastado".

Raúl aguarda por una vez que la selección no amargue su cumpleaños. "Es un poco raro que pueda celebrarlo estando aquí con el equipo", relata; "antes siempre nos habían echado del torneo al llegar el día 24 o el 25. Mejor que el 27 se hubieran disputado las semifinales, pero puede ser una buena jornada". Vuelve Raúl. Regresa el capitán. De nuevo, hay la sensación de que en juego está un partido de los grandes.