2.800 millas de travesía hacia la muerte
Un viejo barco con inmigrantes que salió de Senegal acabó a la deriva en Barbados con 11 cadáveres momificados a bordo
Setenta millas al este de las islas Barbados, un pescador localizó el último fin de semana de abril un oxidado yate, sin mástiles, ni nombre, ni bandera. Subió a bordo y halló a 11 inmigrantes africanos muertos y documentos o enseres de otras 26 personas desaparecidas. Salieron de Senegal, pero se desviaron de la ruta de la inmigración a Canarias. Recalaron en Cabo Verde y allí fueron remolcados por un barco mayor a través del océano hacia Brasil. Alguien cortó el cabo, el viejo barco quedó a la deriva y los inmigrantes, condenados a una muerte segura. El deterioro físico se produjo con tal r...
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Setenta millas al este de las islas Barbados, un pescador localizó el último fin de semana de abril un oxidado yate, sin mástiles, ni nombre, ni bandera. Subió a bordo y halló a 11 inmigrantes africanos muertos y documentos o enseres de otras 26 personas desaparecidas. Salieron de Senegal, pero se desviaron de la ruta de la inmigración a Canarias. Recalaron en Cabo Verde y allí fueron remolcados por un barco mayor a través del océano hacia Brasil. Alguien cortó el cabo, el viejo barco quedó a la deriva y los inmigrantes, condenados a una muerte segura. El deterioro físico se produjo con tal rapidez que quedaron momificados. La corriente norecuatorial, que se desplaza desde Cabo Verde hasta Brasil, los empujó durante tres meses a lo largo de 2.800 millas.