2.000 vecinos opuestos al aparcamiento de pago protestan frente a la Junta de Fuencarral

Unos 2.000 vecinos del distrito de Fuencarral-El Pardo se manifestaron ayer frente a la junta municipal, situada en la calle de Monforte de Lemos, en protesta por la implantación de los parquímetros. Ésta es la manifestación más numerosa del barrio desde que hace tres semanas comenzaron las protestas contra el aparcamiento de pago. En el distrito de Hortaleza, otro de los afectados por la ampliación de la zona de parquímetros, los vecinos también se echaron a la calle. Esta concentración terminó con una carga policial y con un detenido por desobediencia a la autoridad.

La mayoría de los...

Unos 2.000 vecinos del distrito de Fuencarral-El Pardo se manifestaron ayer frente a la junta municipal, situada en la calle de Monforte de Lemos, en protesta por la implantación de los parquímetros. Ésta es la manifestación más numerosa del barrio desde que hace tres semanas comenzaron las protestas contra el aparcamiento de pago. En el distrito de Hortaleza, otro de los afectados por la ampliación de la zona de parquímetros, los vecinos también se echaron a la calle. Esta concentración terminó con una carga policial y con un detenido por desobediencia a la autoridad.

La mayoría de los comerciantes del barrio del Pilar y del entorno de la avenida de la Ilustración echaron ayer el cierre a sus negocios, a las cinco de la tarde, en protesta contra la instalación de parquímetros en la zona. Los empresarios se unieron a los vecinos en una manifestación que reunió a más de 2.000 personas por las calles del distrito. Los manifestantes se concentraron enfrente de la Junta Municipal de Fuencarral-El Pardo, en la calle de Monforte de Lemos, e hicieron sonar silbatos y mostraron pancartas en contra del alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón. Durante la protesta, un grupo de música acompañó la marcha y algunos chicos pintaron de color rosa las líneas que delimitan las plazas de parquímetros (azules y verdes).

Los concentrados se dirigieron luego al único complejo comercial que había abierto: el centro de La Vaguada, contra el que dirigieron sus ataques. "Como La Vaguada tiene aparcamiento subterráneo de pago, todo el mundo va a aparcar dentro. ¡Encima salen beneficiados con lo de los parquímetros!", gritaban algunos vecinos.

Un grupo vecinal intentó entrar en el centro comercial, pero la policía se lo impidió. En medio de la confusión, un agente tiró a una señora al suelo de un empujón. Durante cinco minutos se enfrentaron vecinos y policías. "Yo sólo venía a comprar", afirmó la mujer. Los clientes de una cafetería con ventanales miraban desde dentro, algunos con miedo y otros con indiferencia. Después de algunos minutos a las puertas de La Vaguada, los vecinos volvieron a reunirse frente a la junta de distrito.

Los representantes de la Asociación de Vecinos La Flor (barrio del Pilar) pidieron desde el coche y con un megáfono dinero "para ayudar a los detenidos por romper los parquímetros y que puedan pagar las multas y los costes de la defensa". Los detenidos en protestas de días anteriores, según la asociación La Flor, "son seis menores de edad y uno de 18 años". Un vecino contó además que ha sido multado con 600 euros por participar, el pasado 25 de febrero, en la primera queja vecinal contra el aparcamiento de pago.

Corte de la M-30

Una mujer leyó un manifiesto que afirma, entre otras cosas, que "los parquímetros terminarán con la libertad de moverse por el barrio". La lectura puso el fin oficial a la protesta a las 19.30. Los dirigentes vecinales hicieron un llamamiento para que la gente no bajara a cortar la M-30. Pero no fueron atendidos. Una parte de los manifestantes (unos 500) cortaron la vía de circunvalación en el cruce con la avenida de Betanzos, donde se sentaron en el asfalto. Eso supuso que el tráfico estuviera cortado durante 15 minutos, lo que provocó grandes atascos.

Cuando los manifestantes iban hacia la zona de los arcos de la avenida de la Ilustración, la policía les salió al paso y no les dejó avanzar. Parte de la manifestación se disolvió, pero un hombre estuvo a punto de ser atropellado por un vehículo que bajaba por el lateral de la vía. El incidente recrudeció la protesta, pero los agentes, nuevamente, les bloquearon el paso.

Un empresario de la zona, Luis Jubera, pidió permiso a la policía para cruzar la calle. "Quiero pasar", les dijo. Pero los agentes no le hicieron caso. "Los policías me cogieron de la chaqueta y me tiraron en medio de la calle, me pegaron en el estómago y en el cuello, me intimidaron y me pidieron mi documento de identidad", se quejó.

Por otra parte, medio millar de vecinos se manifestaron en el distrito de Hortaleza contra la ampliación de los parquímetros. La protesta terminó con una carga policial y la detención de uno de los manifestantes por desobediencia a la autoridad, explicaron fuentes policiales.

En el pleno de la Asamblea también se habló de los parquímetros. La presidenta del Gobierno regional, Esperanza Aguirre, afirmó que está "absolutamente a favor de los parquímetros como instrumento regulador de la movilidad y el aparcamiento". Aguirre contestaba así al portavoz socialista, Rafael Simancas, que le había pedido que interviniera para frenar la ampliación del aparcamiento de pago.