Telefónica pone en venta la filial de Páginas Amarillas

Telefónica ha decidido poner a la venta su filial TPI-Páginas Amarillas, de la que controla el 59,9%, siguiendo el ejemplo de otros grandes operadores europeos, que se han desecho de sus directorios. El grupo quiere aprovechar el interés manifestado por varios fondos de capital riesgo que han pedido precio. TPI, que salió a Bolsa en junio de 1999, subió ayer un 6,5% y alcanzó una capitalización de 3.191 millones.

Telefónica ha decidido poner a la venta su filial TPI-Páginas Amarillas, de la que controla el 59,9%, siguiendo el ejemplo de otros grandes operadores europeos, que se han dese...

Telefónica ha decidido poner a la venta su filial TPI-Páginas Amarillas, de la que controla el 59,9%, siguiendo el ejemplo de otros grandes operadores europeos, que se han desecho de sus directorios. El grupo quiere aprovechar el interés manifestado por varios fondos de capital riesgo que han pedido precio. TPI, que salió a Bolsa en junio de 1999, subió ayer un 6,5% y alcanzó una capitalización de 3.191 millones.

Telefónica ha decidido poner a la venta su filial TPI-Páginas Amarillas, de la que controla el 59,9%, siguiendo el ejemplo de otros grandes operadores europeos, que se han desecho de sus directorios. El grupo quiere aprovechar el interés manifestado por varios fondos de capital riesgo que han pedido precio. TPI, que salió a Bolsa en junio de 1999, subió ayer un 6,5% y alcanzó una capitalización de 3.191 millones.

Telefónica no quiere dejar pasar la oportunidad. Varios fondos de capital riesgo (entre ellos Apax Partner) y compañías del sector como la italiana Seat llevan más de un año tocando a la puerta para negociar la compra de TPI-Páginas Amarillas. Al rebufo de ese interés, las acciones de la filial han experimentado una espectacular subida en Bolsa (un 23,3% sólo en lo que va de año). El grupo que preside César Alierta dio ayer el paso y reconoció ante la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) su intención de explorar "alternativas estratégicas" en relación con el 59,9% que posee en el capital de TPI, "incluyendo la venta total o parcial de la misma".

La operadora española sigue los pasos de sus homólogas europeas que se han desprendido de sus filiales de directorios como Telecom Italia (vendió Seat); British Telecom (Yell), la sueca Telia (Eniro), KPN-Sonera (European Directories) o la noruega Telenor (Findexa). Aún conservan sus páginas amarillas los operadores controlados por el Estado como Deutsche Telekom (DeTeMedien) o France Telecom (Pages Jaunes).

Desde el punto de vista financiero, la operación también representa un negocio redondo, ya que Telefónica podría obtener en torno a los 2.000 millones de euros por su participación, que le vendrán muy bien para enjugar su abultada deuda tras la adquisición del operador británico de móviles O2.

Páginas Amarillas salió a Bolsa en junio de 1999 por un valor total de 1.800 millones de euros. Al cierre de ayer, la capitalización bursátil alcanzó los 3.191 millones de euros. Tras la notificación de Telefónica, la cotización de TPI fue suspendida durante unas horas y subió al cierre un 6,51%, la mayor subida del Ibex. Por su parte, la cotización de Telefónica no registró variación alguna, en una jornada negativa para el conjunto de los operadores arrastrados por la nueva caída de Vodafone, que se desplomó un 4,1%.

El grupo TPI comenzó su actividad en España en 1967, con el nombre de Cetesa y actualmente lidera el mercado de directorios de habla hispano-portuguesa, con presencia en cinco países (España, Brasil, Chile, Perú y Argentina) y actividad en medios impresos, Internet y servicios de información telefónica. En España, domina más del 80% del mercado, y su principal competidor es la francesa QdQ.

El beneficio neto de TPI creció un 10,3% en 2005 hasta los 126,93 millones de euros, con unos ingresos de 653,93 millones. TPI pagará este año un dividendo de 0,40 euros por acción, un 33% más que en 2004.

[El consejo de administración de Telefónica anunció ayer que propondrá el pago el 12 de mayo de un dividendo a cuenta de los resultados de 2005, que se conocerán hoy, de 0,25 euros brutos por acción. Asimismo, a lo largo del año se pagará otro dividendo por el mismo importe, con lo que la retribución anual será de 0,5 euros por acción, el mismo que se repartió en 2004.