Cabo San Roque lleva sus curiosos instrumentos a Cabaret Círculo
Un acordeón de juguete, una caja de antirritmos y una especie de sitar realizado con una caja de galletas, una pata de mesa de madera con forma de pata de jamón y unos sargentos de ferretería sirvieron para que los catalanes Laia Torrents, Ramón Garriga y Roger Aixut anticipasen ayer parte del concierto que ofrecerán el viernes próximo en el Círculo de Bellas Artes, dentro del ciclo Cabaret Círculo, que inauguró Pavlovsky y que invitará en marzo a los gitanos rumanos Fanfare Ciorcalia.
Laia, Ramón y Roger pertenecen a Cabo San Roque, un peculiar combo de ocho músicos imposibles del Pobl...
Un acordeón de juguete, una caja de antirritmos y una especie de sitar realizado con una caja de galletas, una pata de mesa de madera con forma de pata de jamón y unos sargentos de ferretería sirvieron para que los catalanes Laia Torrents, Ramón Garriga y Roger Aixut anticipasen ayer parte del concierto que ofrecerán el viernes próximo en el Círculo de Bellas Artes, dentro del ciclo Cabaret Círculo, que inauguró Pavlovsky y que invitará en marzo a los gitanos rumanos Fanfare Ciorcalia.
Laia, Ramón y Roger pertenecen a Cabo San Roque, un peculiar combo de ocho músicos imposibles del Poble Sec (Barcelona) que viajan a Madrid para presentar ese día las canciones de Franca Xica, su segundo disco.
Para Cabo San Roque, la música es una justificación para pasarlo bien y desarrollar toda una brutal imaginación para diseñar instrumentos. Un palo de fregona, un juguete roto, una máquina de escribir estropeada, una bicicleta descuajeringada, un bote de plástico vacío de suavizante líquido, latas, cuerdas, tubos flexibles, una alcachofa de ducha, un viejo baúl de madera, pinzas de la ropa y hasta grapadoras dispuestas en serie sirven para crear música y que suene todo con coherencia.
Estos originales luthiers, con su divertido y estrambótico circo musical, se atreven a recrear la serie Gnossiennes, de Eric Satie o a sonar como los dibujos animados que se hacían al otro lado del telón de acero cuan aún existía. Sus composiciones recuerdan a veces al Sisa más galáctico o al Nacho Mastretta más inspirado.
Según adelantaron los músicos ayer, el espectáculo que va a ofrecer el viernes Cabo San Roque es "como un juego de sillas; un caos en el escenario, porque vamos cambiando constantemente de instrumentos y cada uno lleva una indumentaria y representa un personaje que puede ser identificado por el espectador".
Cabo San Roque. Día 17 de febrero, a las 21.00. Círculo de Bellas Artes (Alcalá, 42). Entrada: 15 euros; socios, 12. www.circulobellasartes.com