'Uuuuh!' confronta la ternura de Charlie Rivel con la barbarie nazi

Fue el contraste entre la ternura y la inocencia de un payaso situado en el corazón de la barbarie del régimen nazi y el ambiente que le rodeaba lo que más interesó al dramaturgo Gerard Vázquez a la hora de escribir Uuuuh!, la primera obra producida por el Teatre Nacional de Catalunya (TNC) que no se estrenará bajo sus columnas. La pieza, dirigida por Joan Font y en la que Ferran Rañé asume el papel de payaso, podrá verse el próximo sábado, dentro del Festival Temporada Alta, en el Teatre de Salt.

La Sala Tallers del Teatre Nacional acogerá el espectáculo a partir del 3 de noviem...

Fue el contraste entre la ternura y la inocencia de un payaso situado en el corazón de la barbarie del régimen nazi y el ambiente que le rodeaba lo que más interesó al dramaturgo Gerard Vázquez a la hora de escribir Uuuuh!, la primera obra producida por el Teatre Nacional de Catalunya (TNC) que no se estrenará bajo sus columnas. La pieza, dirigida por Joan Font y en la que Ferran Rañé asume el papel de payaso, podrá verse el próximo sábado, dentro del Festival Temporada Alta, en el Teatre de Salt.

La Sala Tallers del Teatre Nacional acogerá el espectáculo a partir del 3 de noviembre.

Está documentado que el payaso catalán Charlie Rivel, nombre artístico de Josep Andreu (Cubelles, 1896-Sant Pere de Ribes, 1983), fue uno de los grandes ídolos de la escena en la Alemania nazi. A principios de los cuarenta, en plena guerra mundial, llenaba diariamente el teatro Scala de Berlín, con más de 2.000 localidades. Rivel debió de actuar, quizá en funciones especiales, ante Joseph Goebbels, responsable del aparato propagandístico nazi, y tal vez ante el mismísimo Adolf Hitler.

Este entramado histórico es el que ha servido a Gerard Vázquez, bajo los auspicios del proyecto T6 de autores residentes del Teatre Nacional, para urdir la inventada pero no imposible anécdota central de Uuuuh!, en la que el payaso Charlie Rivel se ve forzado a preparar un espectáculo para la fiesta de cumpleaños de Hitler.

Vázquez cuenta que Rivel era un "ídolo absoluto" para los alemanes y que incluso protagonizó una película. "El Rivel pletórico de aquella época tiene poco que ver con el viejo Rivel que conocimos en Cataluña, entonces era el rey de la acrobacia cómica, con unas facultades físicas apabullantes", asegura el dramaturgo. "El régimen lo trataba muy bien", continúa. "En cuanto a lo que sucedía en Alemania, no está claro si él no sabía o no quería saber".

A pesar de que en sus memorias Rivel elude cualquier referencia a esa época, Vázquez piensa que le marcó profundamente. "Después de la guerra, Rivel estuvo cinco años sin actuar, con una fuerte depresión, y aseguraba que nunca volvería a la escena". La obra de Vázquez, que oscila entre la comedia y el drama, ahonda en la toma de conciencia del artista y encuentra su juego dramático en la preparación del espectáculo para el Führer.

Joan Font, el director de Uuuuh!, asegura haberse sentido muy cómodo en "un formato más humano", alejado de los grandes montajes de Comediants. Font advierte de que la obra es compleja porque integra diferentes estilos teatrales: "Hay escenas de clown, escenas de los ensayos y teatro de texto que pasa por el humor y la tragedia". Ferran Rañé considera un reto interpretar a un personaje de tanta humanidad y con una imagen tan conocida. Tanto Rañé como Font agradecieron la posibilidad de colaborar directamente con el autor durante el montaje. El director del TNC, Domènec Reixach, explicó que el proyecto en el que se enmarca la producción de la pieza tiene precisamente como objetivo "situar a los autores en el eje creativo".

Salvador Sunyer, director del Festival Temporada Alta, elogió el texto, dijo que es "exportable" y lo equiparó con las grandes obras europeas del momento.

Al payaso Chalie Rivel encarnado por Ferran Rañé lo acompañan Witzi (Jordi Martínez), un payaso con antepasados judíos, y Golo (Jordi Rico), otro enigmático clown. Todos bajo la férrea supervisión de Krauss (Pep Molina), un comisario de la Gestapo. En la obra aparece también el personaje metafórico del Rivel niño (Alfonso Blanco).