El 'Quijote' en bruto

REINHOLD METZ, un alemán que trabajaba en una tienda de libros raros, comenzó a tener problemas con su veneración por las ediciones originales del Quijote, de Miguel de Cervantes. Entonces decidió realizar él mismo, a mano, tres copias de la obra: en francés, alemán y español. Pero lo hizo a su estilo y lo más original de su monumental emprendimiento fue que ilustró cada página con elaborados y coloridos dibujos en tinta, sin dejar ni un centímetro de folio en blanco, mezclando texto con imágenes abstractas y recreaciones de las escenas del libro. Su objetivo fue hacer "un libro sin máquinas, ...

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REINHOLD METZ, un alemán que trabajaba en una tienda de libros raros, comenzó a tener problemas con su veneración por las ediciones originales del Quijote, de Miguel de Cervantes. Entonces decidió realizar él mismo, a mano, tres copias de la obra: en francés, alemán y español. Pero lo hizo a su estilo y lo más original de su monumental emprendimiento fue que ilustró cada página con elaborados y coloridos dibujos en tinta, sin dejar ni un centímetro de folio en blanco, mezclando texto con imágenes abstractas y recreaciones de las escenas del libro. Su objetivo fue hacer "un libro sin máquinas, un libro de la época anterior a Gutenberg". Según sus palabras: "Ilustré a Cervantes, a don Quijote y a ese payaso de Sancho Panza, quería volver a la época de los monjes y sus libros de horas escritos y dibujados a mano".