Touriño recomienda "no cebarse" con el presidente de la Xunta
El candidato socialista a la Presidencia de la Xunta, Emilio Pérez Touriño, pasó ayer a un segundo plano y dejó que fuera su líder, José Luis Rodríguez Zapatero, quien lanzara las pullas más agresivas contra su rival, Manuel Fraga. Touriño llegó incluso a pedir, para decepción de muchos asistentes al mitin, que la gente no se cebe con el veterano presidente de la Xunta. "Cada día que pasa Fraga dice más claramente lo que piensa. Luego le obligan a rectificar. No me voy a cebar, y pido a todos que no nos cebemos con quien cada 48 horas insulta a alguien", señaló.
El líder del PSdeG adopt...
El candidato socialista a la Presidencia de la Xunta, Emilio Pérez Touriño, pasó ayer a un segundo plano y dejó que fuera su líder, José Luis Rodríguez Zapatero, quien lanzara las pullas más agresivas contra su rival, Manuel Fraga. Touriño llegó incluso a pedir, para decepción de muchos asistentes al mitin, que la gente no se cebe con el veterano presidente de la Xunta. "Cada día que pasa Fraga dice más claramente lo que piensa. Luego le obligan a rectificar. No me voy a cebar, y pido a todos que no nos cebemos con quien cada 48 horas insulta a alguien", señaló.
El líder del PSdeG adoptó de nuevo el estilo presidencialista que el equipo de campaña le ha diseñado para esta última semana. Con la intención de que los votantes le vean ya como ganador, Touriño ha reducido la intensidad de sus ataques de la primera semana de campaña y ahora se dedica a explicar lo que hará cuando llegue a la Xunta, como si fuera ya algo inevitable. De hecho, según el planteamiento de los estrategas socialistas, el PP ya no tiene tiempo para remontar los errores de los primeros días. Aun así, Fraga nunca queda fuera del discurso de Touriño, al contrario de lo que prometió: "Galicia necesita y merece otro presidente. A Fraga no se le puede encomendar el futuro del país", afirmó ayer.
El PSdeG se centrará esta semana en tratar de movilizar todo lo posible su voto. El candidato pidió en Luego apoyo a los jóvenes para "cerrar un periodo de la historia de Galicia" y a los ancianos les prometió que gobernará "para todos" y nunca preguntará a quién vota cada uno para repartir el dinero público.
Los socialistas necesitan movilizar a sus simpatizantes, pero con cautela, para no activar a ese electorado potencial del PP, especialmente en las ciudades, que podría quedarse esta vez en casa porque está harto de las divisiones internas y no cree que Fraga, con 82 años, sea la solución. En ese complejo objetivo el PSdeG tratará de jugar con una idea que repitieron tanto Touriño como Zapatero: el cambio, en estos momentos, es "la opción más segura" ante la división del PP. Y por supuesto, los socialistas seguirán sin citar a su socio potencial, el BNG, ni para bien ni para mal.