Doce años de cárcel por matar y enterrar a un hombre en Sueca

La Audiencia de Valencia ha condenado a Juan José Aguado, de 43 años, y a Francisco Javier Colubí, de 23 años, a 12 años de cárcel cada uno por la muerte de Francisco Sales, de 69 años, el 9 de enero de 2004 en Sueca. Consta en la sentencia que los acusados estuvieron por la mañana de aquel día en distintos bares consumiendo alcohol y que al mediodía se encontraron con la víctima, a la que conocía Colubí, en el mercado de Sueca. Francisco Sales había comprado para preparar una fideuà y ofreció a los procesados comer juntos. Los tres se trasladaron a una caseta de las afueras propiedad d...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

La Audiencia de Valencia ha condenado a Juan José Aguado, de 43 años, y a Francisco Javier Colubí, de 23 años, a 12 años de cárcel cada uno por la muerte de Francisco Sales, de 69 años, el 9 de enero de 2004 en Sueca. Consta en la sentencia que los acusados estuvieron por la mañana de aquel día en distintos bares consumiendo alcohol y que al mediodía se encontraron con la víctima, a la que conocía Colubí, en el mercado de Sueca. Francisco Sales había comprado para preparar una fideuà y ofreció a los procesados comer juntos. Los tres se trasladaron a una caseta de las afueras propiedad de la madre de uno de los acusados.

Después de preparar la comida, "Francisco Sales tocó los genitales y dio un beso en la boca a Colubí, lo que provocó un enfrentamiento entre los tres. Los acusados comenzaron a golpearlo, le dieron hasta 16 golpes por todo el cuerpo con una azada y un objeto punzante, y dándole patadas". Los acusados dejaron el cuerpo abandonado en la caseta y se fueron a Sueca, a un bar en el que protagonizaron un altercado en el que intervino la policía. Al día siguiente, Colubí llamó a su compinche para ver qué hacían con el cadáver. Y decidieron excavar un hoyo en el jardín de la caseta donde le habían matado. Pocos días después, las manos del cadáver quedaron al descubierto y el compañero sentimental de la dueña de la finca se enteró entonces de lo ocurrido. Colubí dio explicaciones inverosímiles, hasta que finalmente se decidió a ir a la Guardia Civil.

Durante el juicio, los procesaron se culparon mutuamente de la muerte, pero el fallo afirma que "existen pruebas objetivas de que fueron ambos acusados". Para el tribunal, "no puede desprenderse que estuvieran en un estado de intoxicación plena que les impidiera tener conciencia de lo que estaban haciendo". Además de la pena de prisión, los acusados deberán indemnizar con 12.000 euros a cada uno de los cinco hijos de la víctima.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Archivado En