De la boda, a la cancha

Jugador uruguayo de baloncesto contrae matrimonio con una chica madrileña en presencia de testigos con rasgos orientales. Tan verídico como sorprendente. Tanto, que hasta en el juzgado correspondiente se hizo constar una observación en el documento al efecto. La boda se llevó a cabo sin mayor problema y el jugador ha logrado beneficiarse de su nuevo status para fichar por un club con la ventaja de que ya no ocupa plaza de extranjero. No ha sido el único. La proliferación de este tipo de bodas entre jugadores de alto nivel y mujeres españolas es tal que ya se puede hablar perfectamente d...

Jugador uruguayo de baloncesto contrae matrimonio con una chica madrileña en presencia de testigos con rasgos orientales. Tan verídico como sorprendente. Tanto, que hasta en el juzgado correspondiente se hizo constar una observación en el documento al efecto. La boda se llevó a cabo sin mayor problema y el jugador ha logrado beneficiarse de su nuevo status para fichar por un club con la ventaja de que ya no ocupa plaza de extranjero. No ha sido el único. La proliferación de este tipo de bodas entre jugadores de alto nivel y mujeres españolas es tal que ya se puede hablar perfectamente de una moda que hace furor.

El asunto pasó inadvertido al principio. Pero durante las últimas semanas un mexicano, un serbio, un ruso y un par de estadounidenses han logrado los papeles necesarios para casarse y, acto seguido, disponer de una plaza en diferentes clubes de la Liga ACB. En total, son ya siete los jugadores que actúan como asimilados, que así se llama a los extranjeros que pueden ser inscritos por sus clubes como si fueran españoles a todos los efectos tras haberse casado con una española. Además, se asegura que un número de jugadores todavía mayor, más de 15, han hecho lo mismo en competiciones de inferior rango, como la Liga LEB o la Liga EBA, la Segunda y la Tercera División del baloncesto nacional.

La burocracia, a veces tan lenta, en este caso es de lo más rápida. En cuestión de uno o dos días puede celebrarse la boda y el jugador o jugadora en cuestión -también en la Liga femenina se registra algún caso- estará listo para competir como asimilado o asimilada, es decir como si fuera un español más a todos los efectos.

La Federación Española, una vez recibido a través de la ACB el certificado de matrimonio y el documento nacional de identidad de la contrayente o el contrayente español, extiende la licencia. Acto seguido la remite de nuevo a la ACB, que es la que da de alta en la Liga al jugador. Todo sencillo y rápido, conforme a lo que dicta el decreto 178/2003 y también a un fallo del Tribunal Supremo en 2004 que anuló el requisito de un año de convivencia para poder documentar a los cónyuges extranjeros de matrimonios mixtos.

¿Qué sucede a efectos prácticos? Aparte de que algún jugador español ha tenido que dejar su puesto a uno asimilado, algún equipo se va a encontrar de golpe y porrazo con un rival que va a poder contar con dos norteamericanos más. Y en juego puede estar la permanencia en la Liga ACB. Es el caso del Ricoh Manresa, que ha puesto el grito en el cielo cuando ha sabido que un rival directo, como el Unelco de Tenerife, ya alineó como asimilado a Tyron McDaniel, su base estadounidense, de 33 años y 1,90 metros, frente al Estudiantes, sólo dos días después de haber contraído matrimonio el pasado 11 de marzo. El agente de McDaniel, Pepe Catalina, afirma: "La relación es de carne y hueso. Jamás le he dicho que se case para tener trabajo".

El equipo de Tenerife puede beneficiarse en breve de una situación similar. El pívot de Chicago Rashard Griffith, de 30 años y 2,11 metros, tiene previsto contraer matrimonio con una ciudadana española y probablemente esta misma semana.

El entrenador del equipo tinerfeño, Gustavo Aranzana, sintetiza el criterio de los clubes que se han apuntado a la nueva moda: "Nosotros fichamos a McDaniel y parecía que habíamos hecho algo ilegal. Antes lo hicieron otros y no se dijo nada. Es más, incluso parecían más inteligentes que el resto".