Trimestre en positivo
La jornada de ayer en la Bolsa española finalizó, por segundo día consecutivo, con descensos en los indicadores. La preocupación por la trayectoria del precio del petróleo, y la publicación de una serie de datos económicos poco favorables han truncado cualquier intento de recuperación en los mercados.
El Ibex 35 pasó del signo positivo, que mantuvo prácticamente a lo largo de todo el día, a terminar con un descenso del 0,23%, arrastrado, en parte, por el mal comportamiento de Telefónica. En el resto de las plazas europeas las compras también fueron perdiendo fuerza, aunque al cierre log...
La jornada de ayer en la Bolsa española finalizó, por segundo día consecutivo, con descensos en los indicadores. La preocupación por la trayectoria del precio del petróleo, y la publicación de una serie de datos económicos poco favorables han truncado cualquier intento de recuperación en los mercados.
El Ibex 35 pasó del signo positivo, que mantuvo prácticamente a lo largo de todo el día, a terminar con un descenso del 0,23%, arrastrado, en parte, por el mal comportamiento de Telefónica. En el resto de las plazas europeas las compras también fueron perdiendo fuerza, aunque al cierre lograron mínimas subidas en sus índices.
La sesión de ayer cerró el mes de marzo con un descenso en el Ibex 35 del 1,41%, y concluyó el primer trimestre del ejercicio con una subida del 1,96%.
Un trimestre en el que el mercado ha vivido dos partes bien diferenciadas, pues la primera mitad fue netamente alcista, con un alza en el Ibex 35 hasta los 9.634,30 puntos y una rentabilidad anual que superaba el 6%, mejorando así las previsiones más optimistas para todo el año 2005. Por el contrario, en la segunda mitad del trimestre los mercados han reducido sensiblemente sus ganancias, en parte, por la corrección lógica de las plusvalías acumuladas y, fundamentalmente, por las constantes subidas del precio del petróleo, que han devuelto una cierta dosis de incertidumbre. El aumento en el precio del crudo puede provocar tensiones inflacionistas que podrían derivar en subidas de tipos, con el consiguiente efecto negativo sobre la renta variable.
En definitiva, una sucesión de acontecimientos que han alejado el cierre de trimestre de los buenos comienzos con los que se estrenó el año. Ahora, la atención para los próximos meses estará puesta principalmente en la evolución del precio del crudo y los efectos que pueda tener en la marcha de la economía.
El intercambio de acciones en la jornada de ayer no estuvo nada mal, con 3.154 millones de euros. En el mercado de divisas, la moneda única volvió a ganar algo de terreno al dólar y por la tarde se cambiaba en 1,2970 unidades.