Detenidos los tripulantes del barco que llegó con 227 inmigrantes a Tenerife

Agentes de la brigada de extranjería del Cuerpo Nacional de Policía, adscritos a la Unidad contra las redes de Inmigración y Falsedad en Las Palmas y Santa Cruz de Tenerife, comunicaron ayer la detención de los tres tripulantes del barco pesquero Ile D'Olonne, que llegó el 5 de febrero a la costa sur de Tenerife con 227 inmigrantes irregulares subsaharianos.

Los tres detenidos son de nacionalidad ghanesa y pasaron a disposición judicial como presuntos autores de un delito de favorecimiento de la inmigración clandestina. Los detenidos son el capitán (S. T. O., de 41 años), su segu...

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Agentes de la brigada de extranjería del Cuerpo Nacional de Policía, adscritos a la Unidad contra las redes de Inmigración y Falsedad en Las Palmas y Santa Cruz de Tenerife, comunicaron ayer la detención de los tres tripulantes del barco pesquero Ile D'Olonne, que llegó el 5 de febrero a la costa sur de Tenerife con 227 inmigrantes irregulares subsaharianos.

Los tres detenidos son de nacionalidad ghanesa y pasaron a disposición judicial como presuntos autores de un delito de favorecimiento de la inmigración clandestina. Los detenidos son el capitán (S. T. O., de 41 años), su segundo (C. F., de 38 años) y el maquinista (K. A., de 37).

El primero ha permanecido más de un mes oculto en un piso del barrio de Taco (en La Laguna). El segundo fue detenido en el aeropuerto, cuando pretendía viajar entre Tenerife Norte y Madrid, y el tercero fue descubierto en Las Palmas.

Los tripulantes confesaron su implicación en el caso, después de que fueran identificados como tales por decenas de inmigrantes que viajaban a bordo. A pocos días de cumplirse los 40 de retención, 80 de estos náufragos partieron esta semana en un vuelo hacia Ghana, mientras los 147 restantes han sido enviados a Madrid, Barcelona, Valencia y Murcia, con una orden de expulsión y el apoyo logístico de varias ONG.

Aunque la investigación sigue abierta, la policía ya ha adelantado que el barco partió de Liberia, pasó por Guinea Conakry, Senegal y la isla de Praia (en Cabo Verde), desde donde se dirigió a Canarias, aunque, por razones que se desconocen aún, recaló en el sur de Tenerife el 5 de febrero pasado. Cada pasajero abonó entre 2.500 y 3.000 euros en dinero o su valor equivalente en joyas o piezas de oro.

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