Los galácticos menguantes

Los números de los galácticos menguan temporada tras temporada. La luz se extingue. Figo, hace cinco años era capaz de meter el balón en el área tras correr la banda en 404 ocasiones en una temporada. El año pasado sólo lo hizo en 236 ocasiones. Éste, lleva 166. Las estrellas blancas encogen. Roberto Carlos subía la banda izquierda 171 veces en 2001. En 2005 sólo 81, cuando quedan 11 encuentros para el final. Raúl, con mejor o peor estilo, cayéndose o tras dos regates, disparaba en 103 oportunidades en 2001; luego, 87; más tarde, 88; un año más viejo, 91; y, finalmente, en el desplome de esta ...

Los números de los galácticos menguan temporada tras temporada. La luz se extingue. Figo, hace cinco años era capaz de meter el balón en el área tras correr la banda en 404 ocasiones en una temporada. El año pasado sólo lo hizo en 236 ocasiones. Éste, lleva 166. Las estrellas blancas encogen. Roberto Carlos subía la banda izquierda 171 veces en 2001. En 2005 sólo 81, cuando quedan 11 encuentros para el final. Raúl, con mejor o peor estilo, cayéndose o tras dos regates, disparaba en 103 oportunidades en 2001; luego, 87; más tarde, 88; un año más viejo, 91; y, finalmente, en el desplome de esta temporada, 36. Y, claro, marcaba más goles: en el campeonato 2000/2001 hizo 24; el año pasado, 11; éste, 6.

Zidane: "Se ha dicho que estoy mal. No es justo. Estoy bien y voy a estar mejor todavía"

Assunçao suma nueve goles de falta por tres de Beckham en las dos últimas temporadas

Eto'o, el delantero del Barcelona, para que sirva de referencia, ha rematado en 86 ocasiones en las 27 jornadas ligueras que se llevan disputadas. Ha marcado 18 goles. E, incluso, ha centrado en más ocasiones al área, 46, que Raúl (21) y casi las mismas que Zidane (47).

El francés, que tiene contrato con el club blanco hasta 2007 tras una reciente renovación por dos temporadas más, niega el ocaso hablando de sí mismo en tercera persona: "Se ha dicho que Zidane está acabado y no es justo. Estoy bien y voy a estar mejor todavía". Todos los jugadores del Madrid preguntados sobre un posible fin de ciclo han calificado la idea de extravagante, de absurda.

Sin embargo, la decadencia de los dorsales de referencia del club de Chamartín dibuja una gráfica muy nítida. Si fuese una empresa, el balance de resultados estaría rozando el friso inferior de la pizarra: incluso Beckham, con sólo dos campañas para establecer la comparación, rebaja su aportación: El año pasado dio nueve goles a sus compañeros; en la presente, dos. Zidane también ha reducido sus dígitos. Ya ni siquiera le hacen muchas faltas: de 73 en su debú en el año 2001, a las 37 de la actual campaña. También remata mucho menos (76 por 36).

Los números sólo se mantienen en la cantidad de partidos jugados y en el de minutos disputados: casi todos y casi siempre. Los galácticos disputan casi 3.000 minutos ligueros por temporada.

En el caso de Roberto Carlos, Zidane y Figo, el bajón estadístico puede estar relacionado con que superan con holgura la treintena. El brasileño, que ha descendido en su rendimiento de manera paulatina curso a curso y que renovó a principios de temporada hasta 2007, tiene 31 años, el francés, 32 y el portugués, también 32. Todos ellos cumplen años a lo largo de 2005. Sin embargo, Raúl -aunque lleva diez años en la primera plantilla madridista- tiene 27 años; Ronaldo, 28 y Beckham, 29.

El inglés, al que le restan dos años más en la nómina blanca y que ha expresado en alto su deseo "de ganar algo alguna vez con el Real Madrid antes de concluir el contrato", ha jugado esta temporada en diversas posiciones: no ha convencido en ninguna. Si bien es cierto que ha marcado más goles que en la campaña precedente, en esta cuatro y en la anterior tres. De los cuatro de este año, dos han sido de falta directa ante el Numancia: uno en la ida del campeonato y otro en la vuelta. Después, un tercero, también de lanzamiento directo contra Osasuna. Dos de esos tres tantos a balón parado fueron entre la jornada dos y la cuatro del torneo liguero. El británico ha lanzado 21 libres directos. Es decir, marca en uno de cada siete intentos. Marcos Assunçao, el centrocampista brasileño del Betis, ha anotado cuatro goles de falta directa. El año pasado, el jugador del equipo andaluz anotó siete tantos, cinco de los cuales fueron a balón parado. Beckham no marcó un solo gol de esa suerte, en la que, teóricamente, es un maestro y la disciplina que le ha valido una gran parte de su prestigio como futbolista. En resumen, que Assunçao suma nueve goles de falta por tres del inglés en las dos últimas campañas. Beckham, además, asistió en nueve oportunidades a sus compañeros para que celebrasen un gol el curso pasado. En éste, lo ha hecho en dos ocasiones.

El portugués Luis Figo, durante el último mes, ha variado su posición en el campo, abandonando la banda y ejerciendo de vértice en el rombo de ataque. Su actuación en esas cinco jornadas se resume en cinco remates a puerta y ningún gol. Figo tuvo que ser frenado en falta en 159 ocasiones en la temporada pasada. Esta, los defensas han vulnerado el reglamento para detenerle en 75.

Ronaldo, en medio del torbellino de su fiesta, de su peso, de su actitud ante los entrenamientos, también presenta peores números. Ha marcado 12 goles. eso supone que debería anotar un tanto al menos en cada una de las jornadas que restan para casi aproximarse a la cifra de la campaña anterior: 24. Sin embargo, el ariete brasileño es galáctico que menos variaciones sufre en otros apartados.