Reportaje:GESTIÓN Y FORMACIÓN

Los alumnos más innovadores

Un equipo del Instituto de Empresa se impone a 250 rivales en un concurso internacional

España está a la zaga en innovación tecnológica. A pesar de ello, hay profesionales con ganas de desarrollar proyectos e ideas innovadoras. Un ejemplo: dos equipos multinacionales de alumnos de dos escuelas españolas -Instituto de Empresa (IE) e IESE- han demostrado tener, a juicio de empresarios y profesores de Estados Unidos, las ideas más innovadoras entre más de dos centenares de proyectos de todo el mundo.

Innovation Challenge es una competición organizada por la escuela de negocios Thunderbird. Los finalistas se la jugaron en dos días frente a un jurado que debía selecciona...

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España está a la zaga en innovación tecnológica. A pesar de ello, hay profesionales con ganas de desarrollar proyectos e ideas innovadoras. Un ejemplo: dos equipos multinacionales de alumnos de dos escuelas españolas -Instituto de Empresa (IE) e IESE- han demostrado tener, a juicio de empresarios y profesores de Estados Unidos, las ideas más innovadoras entre más de dos centenares de proyectos de todo el mundo.

Innovation Challenge es una competición organizada por la escuela de negocios Thunderbird. Los finalistas se la jugaron en dos días frente a un jurado que debía seleccionar el proyecto más innovador, con mayor potencial comercial y viabilidad... El equipo ganador del IE, formado por cinco estudiantes de su MBA Internacional, planteó remozar la imagen de Valvoline y aumentar el reconocimiento de la marca. El proyecto fue considerado más original que los presentados por equipos de Harvard o INSEAD (Francia). Un total de 251 equipos de 17 países y 81 escuelas diferentes han participado en la competición, que este año celebró su segunda edición.

En el encuentro, organizado en Estados Unidos, han participado conjuntos de 17 países y formados por estudiantes de 81 escuelas

Richard Caelius, capitán del equipo del IE, de 32 años, explica uno de los motivos para presentarse: "Demostrar a los americanos lo que somos capaces de hacer los europeos", dice. Junto a él estaban Alessandro Cappelletti, Claude Heinis, Federico Tonetti y Nicolás Rodríguez, el único con algo de sangre española en las venas.

"Uno de los secretos de la innovación es la diversidad", dice Caelius, que fundó su primera empresa cuando tenía 25 años. Para el alumno del IE, "la innovación no tiene por qué ser lo más reciente ni lo más diferente. El secreto está en la combinación".

El equipo del IESE, que se clasificó entre los 10 primeros, lo tuvo más difícil ya que sus miembros se encontraban en varias escuelas de Estados Unidos por un intercambio de tres meses. Para sacar adelante su proyecto se encontraron en Internet en conferencias telefónicas a varias bandas hasta altas horas de la madrugada. "Era una dificultad añadida", dice Javier Gómez, miembro del equipo; "ha resultado muy divertido".

Su propuesta final pretendía mejorar la imagen de Hilton y, tras la exposición, acabaron cenando con los responsables de la cadena. Junto a él formaban parte del equipo Íñigo Guinea, Ricardo Prego, Francesca Toninato y Joan Parés. Este último deja claro que "no es ningún handicap ser español para presentar soluciones innovadoras", si bien hay trabas para desarrollar este tipo de proyectos en España, lo que produce "una gran fuga de talentos al extranjero". "Estamos a años luz de Estados Unidos", dice Javier Gómez, que quiere trabajar en alguna firma de este país. "No faltan ideas, quizá lo que necesitamos es reunir a la gente que tiene capital con la que tiene ideas", propone como solución.

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