La juez deniega la libertad al acusado de matar a la universitaria de Lleida
La titular del Juzgado de Instrucción número 2 de Lleida, encargada de instruir las diligencias por el asesinato de la estudiante de esa ciudad María Isabel Bascuñana Royo, acordó ayer mantener la situación de prisión incondicional para el ciudadano ecuatoriano Gilbert Antonio Chamba Jaramillo, único detenido como sospechoso del crimen. La juez denegó la libertad del inculpado debido a la gravedad del hecho que se le imputa, a las pruebas que le incriminan y al riesgo de fuga existente.
El presunto homicida compareció ayer, por segunda vez desde su detención, ante la autoridad judicial....
La titular del Juzgado de Instrucción número 2 de Lleida, encargada de instruir las diligencias por el asesinato de la estudiante de esa ciudad María Isabel Bascuñana Royo, acordó ayer mantener la situación de prisión incondicional para el ciudadano ecuatoriano Gilbert Antonio Chamba Jaramillo, único detenido como sospechoso del crimen. La juez denegó la libertad del inculpado debido a la gravedad del hecho que se le imputa, a las pruebas que le incriminan y al riesgo de fuga existente.
El presunto homicida compareció ayer, por segunda vez desde su detención, ante la autoridad judicial. Durante las cuatro horas que duró el interrogatorio, Chamba, de 43 años, no sólo se reafirmó en su primera versión, según la cual no tuvo nada que ver con la muerte de María Isabel, a la que ni siquiera conocía, sino que también negó los ocho crímenes en serie que se le atribuyen en Ecuador, por los que fue condenado en 1993 a 16 años de prisión, aunque sólo cumplió la mitad al beneficiarse de una reducción de pena. Chamba dijo que confesó aquellos crímenes bajo tortura.
Pese a que el acusado se declara inocente, la juez considera que existen elementos suficientes para mantenerle en prisión. Las huellas dactilares del detenido encontradas en la bolsa de plástico que envolvía el cadáver de la joven y en el interior del coche constituyen las principales pruebas de cargo contra Chamba, aunque también existen otras que se están investigando. Aún no se ha determinado si desde alguno de los teléfonos móviles intervenidos en el domicilio del detenido se efectuaron llamadas a la víctima. La juez espera el resultado de unas pruebas de ADN solicitadas al Instituto Toxicológico. Del sumario, cuyo secreto ya ha sido levantado, ha trascendido que la noche en la que supuestamente ocurrió el crimen Chamba no durmió en su casa y que al verse acorralado por la policía compró dos billetes de avión, en ambos casos sólo de ida, para viajar a Venezuela. El primero no lo pudo utilizar porque el día anterior a la partida se sintió indispuesto y tuvo que acudir a urgencias y luego a un centro de asistencia primaria, lo cual le hizo perder el vuelo. Nada más obtener el alta médica compró un segundo billete para marcharse el día 1 de diciembre, pero los mossos que vigilaban sus pasos lo detuvieron antes de emprender el viaje.