La cumbre de la Unión Europea abre la puerta a Turquía con condiciones

Los Veinticinco invitan a Ankara a iniciar el largo proceso hacia la adhesión

Los 25 miembros de la Unión Europea se reunieron anoche para dar el sí a Turquía, con condiciones. Reunidos en Bruselas, los líderes europeos consensuaron invitar a Turquía a iniciar negociaciones para su ingreso, abriendo así la puerta a un proceso largo, conflictivo en algunos países donde la opinión pública está en contra y con condiciones especiales que no se habían dado antes en ningún otro proceso negociador. "Hoy será un día histórico para la UE", declaró el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durão Barroso. Dentro de varios meses comenzará una negociación que puede durar die...

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Los 25 miembros de la Unión Europea se reunieron anoche para dar el sí a Turquía, con condiciones. Reunidos en Bruselas, los líderes europeos consensuaron invitar a Turquía a iniciar negociaciones para su ingreso, abriendo así la puerta a un proceso largo, conflictivo en algunos países donde la opinión pública está en contra y con condiciones especiales que no se habían dado antes en ningún otro proceso negociador. "Hoy será un día histórico para la UE", declaró el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durão Barroso. Dentro de varios meses comenzará una negociación que puede durar diez o quince años.

Las conclusiones finales de la cumbre que se inició ayer en Bruselas, y que concluirá hoy, recogerán expresamente que las negociaciones con Turquía tienen por objetivo "la adhesión de Turquía a la UE", aunque nunca antes de 2014.

"Se trata de negociaciones de adhesión", declaró Gerhard Schröder, canciller alemán, para hacer frente a los que defendían opciones como la "asociación privilegiada" de Turquía con la UE.

Entre las condiciones más duras impuestas a Ankara, los Veinticinco fijarán que se trata de un proceso "cuyo resultado no puede garantizarse de antemano". La Unión Europea, además, se reserva una cláusula de salvaguardia "permanente" para no aplicar a los trabajadores turcos el sagrado principio comunitario de la libertad de movimiento. "Seamos francos. No es una ampliación más. No es un caso corriente. Es especial. Plantea problemas específicos. En muchos países, las opiniones públicas son reticentes. Hay muchos europeos que no están convencidos. Se trata de un desafío de gran magnitud para Europa", recordó el presidente de la Comisión.

El primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, aseguró ayer que tendrá una "actitud positiva" hacia Chipre, un país que se verá obligado a reconocer si quiere ser socio de la Unión Europea. Javier Solana, alto representante de Política Exterior de la UE, recordó por su parte que "Turquía es un país muy importante desde el punto de vista estratégico, en el corazón de Oriente Próximo".

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