Un libro rompe tópicos sobre los inmigrantes

Las empresas españolas se están acostumbrando a tener plantillas multinacionales. Es el efecto de la inmigración, un fenómeno creciente que se refleja en los casi tres millones de extranjeros que residen en España. Con el objetivo de conocer cómo tratan las compañías a esos trabajadores de cultura y orígenes diferentes, un equipo de investigadores de la escuela de negocios IESE ha analizado un centenar de organizaciones nacionales y multinacionales. Recogidas en el Libro Blanco sobre las mejores prácticas para la integración del trabajador inmigrante en las empresas españolas, sus conclusiones...

Las empresas españolas se están acostumbrando a tener plantillas multinacionales. Es el efecto de la inmigración, un fenómeno creciente que se refleja en los casi tres millones de extranjeros que residen en España. Con el objetivo de conocer cómo tratan las compañías a esos trabajadores de cultura y orígenes diferentes, un equipo de investigadores de la escuela de negocios IESE ha analizado un centenar de organizaciones nacionales y multinacionales. Recogidas en el Libro Blanco sobre las mejores prácticas para la integración del trabajador inmigrante en las empresas españolas, sus conclusiones rompen con algunos tópicos, como que los trabajadores musulmanes exigen un tratamiento diferente para cumplir con sus obligaciones religiosas. Lo que no es un tópico, siempre según este trabajo, es el miedo y los prejuicios que muchos españoles tienen hacia el fenómeno de la inmigración: el 52% considera que hay demasiados extranjeros y un 17%, que constituyen el tercer problema más importante para España.

El 52% de los españoles considera que hay demasiados extranjeros, y un 17%, que la inmigración es uno de los grandes problemas

La investigación, puesta en marcha también por Sagardoy Abogados y la consultora Creade, constata que los trabajadores musulmanes tienen un grado de compromiso con la empresa muy elevado y cumplen a rajatabla sus normas. Eso sí, exigen ser tratados como cualquier otro empleado, con los mismos derechos y obligaciones.

Otra de las conclusiones del trabajo es que la inmigración actual no tiene nada que ver con la que vivieron los emigrantes españoles de los años sesenta y setenta. La principal diferencia es que muchos de los extranjeros que hoy escogen como destino España, lo hacen para establecerse de forma indefinida, mientras que el emigrante español que se trasladaba a Suiza o Alemania, por ejemplo, lo hacía con la idea de volver.

Para llegar a estas conclusiones, los investigadores han entrevistado a responsables de recursos humanos y han contado con la ayuda de sindicatos, abogados y representantes de la Administración. Compañías como el Grupo Vips, donde el 52% de los 7.000 empleados nació fuera de España, Caja Madrid, NH Hoteles, RTVE, Vodafone o Indra, son algunas de las organizaciones analizadas.

El Libro Blanco, que ha sido enviado al Gobierno, empresarios y sindicatos, recoge también la opinión de algunos expertos sobre la política más adecuada para controlar la inmigración. En este sentido, empresarios y sindicatos coinciden en afirmar que existe cierto interés en mantener una parte de la inmigración en situación de irregularidad. En relación al nuevo reglamento de regularización de los inmigrantes que ya están en España, los criterios son dispares. Los autores reconocen la dificultad para las pequeñas empresas de demostrar el arraigo y recogen la opinión de los sindicatos de que esta vía no debe ser un proceso extraordinario. Para los empresarios, la solución debe ser fomentar que los inmigrantes lleguen de forma legal.