Zagreb veta a Gurovic por un tatuaje

El Ministerio del Interior de Croacia ha prohibido al baloncestista serbio Milan Gurovic la entrada en el país por llevar tatuado en su brazo al jefe de un movimiento serbio de la Segunda Guerra Mundial considerado responsable de matanzas de croatas. Gurovic debía participar en un partido que su club, el Partizán, tiene previsto jugar mañana en Zagreb ante el Cibona, en el marco de una Liga de baloncesto balcánica. El tatuaje del líder chetnik Draza Mihailovic en el brazo de Gurovic representa una "manifestación, incentivo y llamada a la violencia u odio racial, étnico o confesional", a...

El Ministerio del Interior de Croacia ha prohibido al baloncestista serbio Milan Gurovic la entrada en el país por llevar tatuado en su brazo al jefe de un movimiento serbio de la Segunda Guerra Mundial considerado responsable de matanzas de croatas. Gurovic debía participar en un partido que su club, el Partizán, tiene previsto jugar mañana en Zagreb ante el Cibona, en el marco de una Liga de baloncesto balcánica. El tatuaje del líder chetnik Draza Mihailovic en el brazo de Gurovic representa una "manifestación, incentivo y llamada a la violencia u odio racial, étnico o confesional", afirmó el portavoz del ministerio del Interior croata, Zlatko Mehun.

Mihailovic, acusado de genocida y de servir a los intereses de la Alemania nazi, fue fusilado en 1946. Mehun añadió que el tatuaje exhibido por Gurovic es contrario a la legislación croata y el uniforme del Partizán no lo cubre. Mehun aseguró que su ministerio había advertido a tiempo a las autoridades deportivas y diplomáticas serbias y croatas contra la llegada de Gurovic a Croacia. El episodio no es nuevo. En marzo de 2003, cuando pertenecía al Unicaja, fue el propio Gurovic quien se negó a viajar a Zagreb por temor a ser objeto de represalias. Gurovic es aficionado a los tatuajes y decidió estamparse la imagen del general en 2002, después de ganar el Mundial con la selección serbia.